Convencido de que le tienen “envidia” y que lo quieren “hundir”, Javier Messina, el cantante punk de la peatonal a quien los comerciantes de la zona
quieren echar al acusarlo de que “desafina” y provoca disturbios, salió a defenderse. El joven, que toca a la gorra por las tardes en Córdoba y Corrientes, asegura que además de detractores tiene gente que gusta de sus interpretaciones, y señaló que planea hacer una denuncia por discriminación contra quienes lo rechazan. Y que va a seguir “a muerte” con su música.
“Que desafino lo dice gente que tiene envidia y discrimina. Como ahora me va bien, mi fotolog se llena de gente y voy a tocar con mi banda Sueños Punk Rock el 24 de noviembre en La Cueva (Sarmiento y Urquiza, con entrada al módico precio de 15 centavos), me quieren hundir”, aseguró Javier en diálogo con Radio 2, donde de paso aprovechó para promocionarse. “Pero voy a hacer una denuncia por discriminación porque esto no puede seguir así”, arrojó después.
En diálogo con Alberto Lotuf en el programa De tarde en tarde, el músico juró que va a “defender el punk rock a muerte” porque lo lleva “en la sangre”. “Esto es mi vida y no traicionaría nunca mi ser. Lo llevo en la sangre y quiero mostrar lo que es el punk rock”, expresó, a la vez que señaló que “hay mucha gente” a favor de su trabajo y que le dice que entona bien, incluso su propia profesora de canto.
Sin embargo, Javier se mostró afectado por las críticas que recibió: “Me han agredido muchísimo y hasta amenazado con que iba a tener problemas”, contó, y reconoció que hasta en el seno familiar hay controversias por sus gustos.
“Mi familia está en contra mío. Pero a la gente que la gusta la música le digo que le dé para adelante”, sugirió.
Desde hace semanas, Javier Messina, de 25 años, se viste todo de negro y encapuchado, se instala en pleno centro con su guitarra y un amplificador y canta bajo el seudónimo "Dios Punk". En sus mejores días se lleva a casa 20 pesos.
“Que desafino lo dice gente que tiene envidia y discrimina. Como ahora me va bien, mi fotolog se llena de gente y voy a tocar con mi banda Sueños Punk Rock el 24 de noviembre en La Cueva (Sarmiento y Urquiza, con entrada al módico precio de 15 centavos), me quieren hundir”, aseguró Javier en diálogo con Radio 2, donde de paso aprovechó para promocionarse. “Pero voy a hacer una denuncia por discriminación porque esto no puede seguir así”, arrojó después.
En diálogo con Alberto Lotuf en el programa De tarde en tarde, el músico juró que va a “defender el punk rock a muerte” porque lo lleva “en la sangre”. “Esto es mi vida y no traicionaría nunca mi ser. Lo llevo en la sangre y quiero mostrar lo que es el punk rock”, expresó, a la vez que señaló que “hay mucha gente” a favor de su trabajo y que le dice que entona bien, incluso su propia profesora de canto.
Sin embargo, Javier se mostró afectado por las críticas que recibió: “Me han agredido muchísimo y hasta amenazado con que iba a tener problemas”, contó, y reconoció que hasta en el seno familiar hay controversias por sus gustos.
“Mi familia está en contra mío. Pero a la gente que la gusta la música le digo que le dé para adelante”, sugirió.
Desde hace semanas, Javier Messina, de 25 años, se viste todo de negro y encapuchado, se instala en pleno centro con su guitarra y un amplificador y canta bajo el seudónimo "Dios Punk". En sus mejores días se lleva a casa 20 pesos.
Cargando audio...
¿Desafina o no? El joven cantó en el programa de Lotuf