El peronismo en el Senado reclamó este martes abrir la semana próxima la discusión sobre la ley de legalización del aborto en un plenario de dos comisiones que pretende encabezar, en un debate que se anticipa caliente ya que 30 senadores se cuentan entre quienes rechazan la despenalización y 26 se encoluman detrás del apoyo pero 16 se mantienen indefinidos.
A la cabeza de los antiabortistas, la vicepresidenta Gabriela Michetti reunió a los senadores de su bancada, Federico Pinedo, Esteban Bullrich y Silvia Elías de Pérez, con quienes analizó la posibilidad de plantear modificar la media sanción que llegó este martes al Senado desde la Cámara de Diputados, donde fue aprobada por 129 votos contra 125.
Ese grupo de senadores de Cambiemos ya había adelantado su posición contraria a la legalización y en cambio se inclinaría por "una despenalización más moderna" que reduzca las penas para la mujer que se practique un aborto y para quien lo realice.
Si prosperara la postura de introducir cambios, tendría que volver a la Cámara de Diputados para reabrirse allí el debate, algo que no comparte todo el oficialismo del Senado.
La iniciativa fue enviada desde la presidencia de la Cámara baja a la Mesa de Entradas del Senado y será girada a las comisiones de Salud, que preside el radical Mario Fiad, y de Justicia y Asuntos Penales, que conduce Pedro Guastavino.
El jefe de los senadores del peronismo, Miguel Pichetto, que ya se pronunció a favor de la norma, reclamó esta tarde abrir a más tardar la semana próxima la discusión en comisiones.
En una nota dirigida a la presidencia del Senado, Pichetto solicitó que la comisión de Justicia y Asuntos Penales que preside su colega de bancada, Guastavino, conduzca las audiencias, secundada por Salud, que encabeza Fiad.
La vicepresidenta Michetti deberá decidir en las próximas horas si gira el texto aprobado por la Cámara de Diputados sólo a esas dos comisiones o si incluye también a la Banca de la Mujer y a Presupuesto, y cuál será la encargada de dirigir el debate.
El proyecto de ley que legaliza la interrupción voluntaria del embarazo hasta la semana 14 de gestación con el sólo consentimiento de la mujer recibió media sanción de la Cámara de Diputados el jueves pasado por 129 votos a favor y 125 en contra.
Apenas aprobada en Diputados, en un histórico debate que fue seguido por una muchedumbre en una vigilia en las afueras del Congreso, la iniciativa fue respaldada públicamente por los jefes de las principales del Senado, Pichetto, y su par del oficialismo, Luis Naidenoff.
Como se desconoce en qué momento podrá el líder de Cambiemos en el Senado retomar su actividad después de la muerte de su esposa y de su hijo de 16 años intoxicados por monóxido de carbono, los jefes de los bloques pospusieron hasta la semana próxima una reunión para delinear los términos en que se desarrollarán las audiencias.
El proyecto aprobado por la Cámara de Diputados para legalizar el aborto declara esa iniciativa de "orden público", autoriza la objeción de conciencia de los médicos pero no de las instituciones y crea una comisión bicameral que tendrá que hacer un seguimiento sobre la aplicación de la ley.