La Cámara de Senadores aprobó y convirtió en ley la reforma tributaria, que prevé la disminución gradual de impuestos en un plazo de cinco años.
El proyecto obtuvo 52 votos a favor, 15 en contra y una abstención, de Lucila Crexell (Movimiento Popular Neuquino).
El interbloque Argentina Federal, que encabeza Miguel Pichetto, le garantizó a Cambiemos un triunfo por amplia mayoría, frente al rechazo del Frente para la Victoria-PJ, referenciado en la expresidenta Cristina Kirchner, y del interbloque Parlamentario Federal, que lidera el puntano Adolfo Rodríguez Saá.
La iniciativa sancionada promueve una rebaja de impuestos como Ingresos Brutos; grava por primera vez la renta financiera; y modifica gravámenes internos, como los que alcanzan al tabaco -se fija una alícuota del 73%- y los combustibles.
No habrá cambios en el impuesto interno al vino, pero sí los habrá en las cervezas, que serán gravadas con una alícuota del 14% en el caso de las industriales, y con un 8% en el caso de las artesanales, es decir, las producidas por pymes.
Se mantuvo a su vez el actual impuesto del 4% para las gaseosas con jugo de limón, y del 8% para las analcohólicas, con o sin azúcar.
Por otra parte, el Senado también aprobó este miércoles el Presupuesto nacional:
AHORA con 54 votos afirmativos y 14 votos negativos queda aprobado el #Presupuesto2018 pic.twitter.com/zmxa4x6bRh
— Senado Argentina (@SenadoArgentina) 28 de diciembre de 2017