Un informe de El Tres dejó expuesta la situación de abandono de algunos viejos inmuebles del centro rosarino cuya inestabilidad pone en riego a los peatones y vecinos. No sólo preocupan los desprendimientos sino también la basura acumulada en los interiores que llama a la presencia de roedores.
El periodista Juan Cruz Funes recorrió la zona del casco histórico y mostró la condición deplorable de algunos edificios. Mampostería suelta, balcones apuntalados, grietas profundas en donde crecieron plantas, humedad, quebraduras. También abandono que se traduce en la acumulación de basura, restos de todo tipo que atrae a roedores e insectos.
Los vecinos expusieron el malestar que les produce convivir con estos ladrillos desprendidos. Tienen miedo de que parte de ese material flotante se les caiga encima; también les preocupa las consecuencias que pueden ocasionar en las edificaciones linderas.
El fin de semana hubo un botón de muestra. Pesados bloques de mampostería cayeron desde lo alto de una vieja casona abandonada en Rioja al 735. Afortunadamente, no resultó herido nadie. Por ahora.