Ayer el Senado nacional aprobó la norma que prorroga por un año la potestad del Poder Ejecutivo de fijar las retenciones a las exportaciones y un grupo de ruralistas encabezados por el dirigente de Federación Agraria entrerriana, Alfredo De Ángeli organizó una importante manifestación que terminó con un enfrentamiento con la policía.
Este viernes, su segundo, Juan Ferrari, el vicepresidente de la FFA de Entre Ríos, redobló la apuesta al límite. En contacto con el programa Diez Puntos (Radio2), dijo que el sector agrario“tiene una sensación amarga, hubo un quiebre institucional porque tanto el Poder Ejecutivo como el Legislativo nos dieron una cachetada, esto es un divorcio”. “Es muy lamentable”, continuó el dirigente y sostuvo que “se está perdiendo el respeto a las autoridades”.
Para Ferrraris “empezarán a surgir más focos de conflicto y esto se va a poner ingobernable. El gobierno hace a gusto y a paladar y el pueblo empieza a hacer lo mismo”, lanzó.
Luego, profundizó su postura al manifestar: “Nosotros estamos dentro de la ley pero no sabemos lo que viene. El conflicto se va a profundizar porque el achique económico es más pronunciado de lo que parece”.
Este viernes, su segundo, Juan Ferrari, el vicepresidente de la FFA de Entre Ríos, redobló la apuesta al límite. En contacto con el programa Diez Puntos (Radio2), dijo que el sector agrario“tiene una sensación amarga, hubo un quiebre institucional porque tanto el Poder Ejecutivo como el Legislativo nos dieron una cachetada, esto es un divorcio”. “Es muy lamentable”, continuó el dirigente y sostuvo que “se está perdiendo el respeto a las autoridades”.
Para Ferrraris “empezarán a surgir más focos de conflicto y esto se va a poner ingobernable. El gobierno hace a gusto y a paladar y el pueblo empieza a hacer lo mismo”, lanzó.
Luego, profundizó su postura al manifestar: “Nosotros estamos dentro de la ley pero no sabemos lo que viene. El conflicto se va a profundizar porque el achique económico es más pronunciado de lo que parece”.