Primero fueron las pruebas pilotos en distintas escuelas de Rosario y la provincia. Después siguió la consolidación de los espacios de formación y los consejos de convivencia en 700 primarias, iniciales y especiales, 400 secundarias y 100 establecientos para adultos. Y a partir del lunes, cuando se realice en todas escuelas de Santa Fe la jornada “Escuela abierta” comenzará una nueva etapa en el plan de “Prevención integral de consumo problemático de sustancias y adicciones”.

La capacitación se desarrollará con clases en los establecimientos porque el objetivo es capacitar a los directivos y docentes junto a los estudiantes. La lógica es tomar conciencia de la situación, analizarla y dar herramientas desde el Ministerio de Educación y del programa Abre Vida y Lazos para que cada institución diseñe su propio abordaje.

Uno de los objetivos es que la comunidad educativa identifique y genere alertas de chicos con algún tipo de consumo problemático de sustancias (en general drogas y alcohol) para después avisar e interactuar con otros organismos (centros de salud, municipio, Desarrollo Social, entre otros). También señalar el abandono escolar a tiempo para activar herramientas del Estado que ya están en marcha, como “Vuelvo a estudiar”.

“El abordaje punitivo de los consumos y adicciones no ha dado resultado en ninguna parte del mundo. Eso lo tenemos muy estudiado, por el contrario, el consumo aumentó”, aseguró la ministra de Educación, Claudia Balagué, y apostó a la multiplicación de “preventores” (maestros, no docentes, padres y chicos) en los territorios.

“Una campaña de televisión está más asociada al marketing político que al abordaje real de las causas. Y la escuela es un ámbito privilegiado para hacer prevención”, agregó la funcionaria, quien aclaró que el trabajo de "Escuela abierta", más los consejos de convivencia y el programa Lazos -con referentes que visitan cada 15 días un tercio de las escuelas provinciales- implica que “con los años este trabajo ha tomado el volumen de política de Estado”.

Cecilia Nieto, titular de Aprecod y coordinadora de Abre Vida, señaló que desde ese espacio presentado en enero consideran que "en chicos de menos de 18 años todos los consumos son problemáticos”. El acercamiento busca “sacar los prejuicios” y considerar que un adolescente que consume “es un llamado de atención”. Antes de que esa historia particular se convierta en un caso de adicción.

"Los consejos de convivencia cuestionan el formato histórico de la escuela y por eso hubo resistencias cuando empezamos. Es un mito que sólo pueden trabajar especialistas con estos temas", agregó Germán Falo, de Lazos. "Los chicos necesitan otras escuchas", sumó Nieto.

El salto de este lunes será cuantitativo: se pasará del trabajo en los 1.200 establecimientos mencionados a la totalidad de los cinco mil que tiene la provincia. Y de los 14.500 docentes alcanzados a los 75 mil. “Bajar línea desde el Ministerio no da resultados. Por eso la forma es el trabajo conjunto y la formación docente”, defendió Balagué.