El frente de una vivienda y el vehículo de su propietaria fueron baleados en la noche de este martes en Fresno al 7900, en la zona noroeste de Rosario. Según aseguró la mujer, el hecho está vinculado a las denuncias que radicó contra su hermano y padre por venta de estupefacientes en la zona. Además, ligó al personal policial de la subcomisaría 21ª con la presunta banda narco. "Voy a terminar en un zanjón", dijo la víctima.
En diálogo con El Tres, Marisa, dueña del auto y la casa baleada, contó que la agresión se produjo este martes pasadas las 20, cuando ella suele estar con parientes menores de edad afuera del domicilio.
"Pasó el auto de mi cuñada, la pareja de mi hermano. Estaba él y otros integrantes más. Escuchamos disparos. Empezamos a cubrir a los chicos porque estábamos adentro. Los alcanzamos a ver cuando se iban. Entraron balas", relató.
"Es una situación que lleva dos años. Hay balas de dos años atrás por haber denunciado a mi padre y hermano. Venden (droga) detrás de la comisaría, en el playón. La comisaría está con ellos. No podés hacer una denuncia porque te hacen una causa a vos", agregó.
Marina apuntó que en el playón detrás de la seccional policial "se instalaron los soldaditos" de su hermano para vender estupefacientes. "Piensan que nosotros al tener gendarmería dos años y medio (custodia) le mandamos gendarmería para que no los dejen vender", aseveró.
"Lo que no hizo la justicia en dos años lo hice yo en una semana filmando cómo vendían, quiénes son los soldaditos. Tengo 20 denuncias hechas. Él sigue vendiendo. Tiene departamentos, autos. Le dan libertad. Me dijo «Denunciame, para eso pago»", subrayó.
La mujer añadió que su hermano tiene antedecentes por "un homicidio" y aseguró que tiene "otro más arriba (cometido)". "Voy a terminar en un zanjón. No le va a temblar el pulso en venir a matarme. Pero las denuncias están. Le voy a echar la culpa a los jueces y fiscales que no hicieron nada. Todos saben quien es el Toro", concluyó.
