A horas de dejar el sanatorio donde estuvo internado en las últimas dos semanas, a Matías Horacio Messi se le dictó prisión domiciliaria hasta el 23 de diciembre próximo, en base a un acuerdo alcanzado entre la Fiscalía y la defensa del imputado –por tenencia de arma de guerra– y aceptada por la Justicia.
Este lunes se realizó la audiencia de revisión de la medida cautelar vigente desde el 3 de diciembre pasado, cuando el hermano del crack rosarino Lionel Messi fue imputado por el delito de “portación de arma de fuego de guerra en calidad de autor”, figura que prevé una pena que va de 3 años y medio hasta 8 años y medio de prisión.
Matías Messi fue dado de alta luego de una serie de intervenciones quirúrgicas faciales por lesiones sufridas el pasado 30 de noviembre. Según su relato, ese día protagonizó un accidente con su lancha al chocar con un banco de arena en el Paraná, donde fue encontrado herido y a la deriva por pescadores.
Luego de dejar el sanatorio de Oroño al 800, Messi quedó alojado bajo custodia en un domicilio particular de la ciudad de Rosario y el garante de dicha estadía será su padre, Jorge Messi, según informaron los fiscales del caso, Matías Ocariz y Lucas Altare.
Dichos funcionarios precisaron que la prisión domiciliaria fue aconsejada en el informe médico forense, que recomienda particulares cuidados al paciente y una dieta estricta en medio del post operatorio por traumatismo facial grave y de un “estado de salud delicado” del paciente.
“Además de la dieta, hay que garantizar las condiciones de higiene y asepsia para evitar infecciones”, señalaron los fiscales en contacto con los medios.
También sostuvieron que, si bien aún “hay medidas en curso” en el marco de la investigación, “las heridas del imputado y la sangre encontrada en su lancha son compatibles –con el accidente que él dijo haber protagonizado– pero esa confirmación va a estar con los análisis de ADN”.
En tanto, también desde Fiscalía se confirmó que el juez de Primera Instancia Andrés Donnola, que entiende en la causa, aceptó el acuerdo presentado por las partes, que del lado de Messi estuvo representada por los abogados particulares Ignacio Carbone y Froilán Ravena. Éstos también confirmaron públicamente el acuerdo de prisión domiciliaria.
“Están dadas todas las garantías, Matías no se va a fugar, el garante es su padre”, sentenció Carbone en diálogo con la prensa, y recordó que en caso de comprobarse que el arma sea suya, se planteó una pena atenuada de dos años y medio de prisión, y eventualmente en suspenso.
La primera imputación a Matías Messi fue realizada por el fiscal José Caterina, de la Unidad de Flagrancia, el 5 de diciembre último, cuando se dispuso el paso de la causa a la unidad Especializada de Delitos Informáticos con arma de fuego.