Según lo expresa la Organización Mundial de la Salud (OMS), “la nutrición adecuada es fundamental para la supervivencia, el crecimiento físico, el desarrollo mental, el desempeño, la productividad, la salud y el bienestar durante toda la vida: desde las primeras etapas del desarrollo fetal y el nacimiento, hasta la lactancia, la niñez, la adolescencia y la edad adulta”.

La misma OMS, llamó el año pasado a tener en cuenta que “una dieta saludable empieza con suelos saludables y semillas saludables. Estas forman la base para la agricultura sostenible y la producción de alimentos nutritivos. También son importantes para construir sistemas alimentarios sostenibles que contribuyan a reducir el desperdicio y la pérdida de alimentos”.

Y concluye: “Sólo los sistemas alimentarios saludables pueden conducir a dietas saludables”. La nutrición, pilar fundacional de la salud de la población, tiene un mensaje para todos los actores sociales, quienes junto a los integrantes de las instituciones de la democracia, los funcionarios de la salud pública, y la comunidad educativa, tienen la obligación inexcusable de legislar al respecto y hacer cumplir las leyes que apuntan a proteger a los ciudadanos y sobre todos a los niños.

Se trata, como vemos de un tema que debería preocupar a la comunidad y mantener ocupados a sus integrantes: padres, comunidad educativa, funcionarios de salud pública y profesionales de la salud.

Según un informe del Ministerio de Salud de la Nación, el 30% de niñas y niños en edad escolar tiene sobre peso y el 6% obesidad.

Sólo el 17,6 % consume 5 porciones diarias de frutas y verduras. El 50% consume 2 o más bebidas azucaradas al día. Semanalmente, la sociedad está expuesta a 60 publicidades de alimentos no saludables. Las causas son que se ha reemplazo las comidas caseras por aquellos alimentos ultraprocesados con un alto contenido de sal, azúcar y grasas; además, el hábito sedentario se adueña de gran parte de la población adulta e infantil.

La pregunta es, qué se hace desde el Estado para hacer frente a este problema que ya se ha instalado en la sociedad. Rosario3.com, consultó, una vez más, a la Presidente del Colegio de Graduados en Nutrición de la Provincia de Santa Fe, 2da Circunscripción, Marcela Marchegiani, licenciada en nutrición, a quien le trasladamos nuestra preocupación por la regulación de los alimentos que se expenden en las cantinas escolares.

“Hay una ley que fue sancionada en diciembre de 2017. En enero de este año tuvimos la primera reunión junto a autoridades de educación y de salud de la Provincia, con la finalidad de aportar desde nuestro colegio de profesionales su regulación y puesta en funcionamiento. Quedamos en concretar una próxima reunión y estamos todavía esperando la convocatoria”, sostuvo.

“El problema con que nos enfrentamos es que todos los días recibimos niños con diabetes e hipertensión arterial. Niños con sobre peso y en algunos casos, obesidad. Esto es algo que hace unos años atrás era impensado. Los cambios de hábitos están impactando negativamente sobre la población adulta e infantil. El pronóstico es a todas luces desalentador”, aseveró.

¿Qué debemos hacer?

En primer lugar poder mostrarles a la comunidad y a los líderes de opinión y a los decisores en materia de políticas públicas, los estragos que hacen la mala alimentación, el consumo masivo de productos ultraprocesados con altos contenidos de sal, gracias y azúcares, el bombardeo publicitario de ese tipo de alimentos y los malos hábitos de consumo junto al sedentarismo. Nosotros como profesionales debemos alertar a la población sobre este flagelo. E incentivar a las autoridades para ponerle freno. Es perentorio trabajar conjuntamente para conseguir el objetivo de que nuestra población incorpore hábitos saludables y que controlemos la alimentación de nuestros niños y jóvenes, sobre todo.

Es muy importante que se controle lo que se expende en las cantinas. Hacer extensivo a ese ámbito el hábito de consumo de alimentos saludables, como frutas y verduras. Debemos bregar para que la ley legisle para todos los colegios; ya que en todos se expenden alimentos no saludables que afectan a la salud de los niños y jóvenes. También y al mismo tiempo concientizar a las autoridades que la copa de lecho no puede ir acompañada de una factura. Esto también es un punto a modificar ya que afecta a la salud de la población infantil.

Marcela Marchegiani
Marcela Marchegiani | Lic en Nutrición | Matrícula: 667 | Presidenta del Colegio de Graduados en Nutrición de la Provincia de Santa Fe 2da Circunscripción