El producto se llama Flop y sirve para contener los pies reumáticos durante los períodos de descanso. Brinda un complemento para tratamientos específicos de esta afección, que padecen más de siete millones de personas en Argentina. El diseño puede ser confeccionado íntegramente con materiales de bajo costo y origen nacional. Fue desarrollado en el marco de un trabajo final de la carrera de Diseño Industrial de la Facultad de Arquitectura, Urbanismo y Diseño de la UNC.

La artrosis es una enfermedad degenerativa de los tejidos que protegen los extremos de los huesos y facilitan el movimiento de las articulaciones. Provoca que los huesos se rocen o friccionen, lo que produce inflamación, dolor y pérdida de la capacidad motriz.

Según datos del Indec, obtenidos en 2011, el 45 % de la población total de la Argentina de más de 40 años padece algún tipo de discapacidad motriz de los miembros inferiores por causa de la artrosis. Es decir, aproximadamente siete millones y medio de personas sufren la patología en diferentes niveles de intensidad.

Favorecer un tratamiento integral

A diferencia del calzado terapéutico común, Flop permitiría que los pies se relajen gracias a sus características ergonómicas: puede amortiguar la marcha y distribuir el peso del paciente a través de los realces de la plantilla; no contiene laterales rígidos correctores, y está confeccionado con materiales blandos en su estructura y en su recubrimiento.

Agostina Ribba, una de las diseñadoras industriales que crearon el calzado, explica: “Desde el punto de vista de la ergonomía, tomamos las zonas de mayor concentración de tensión en el miembro inferior y trabajamos sobre la contención de las zonas afectadas. Así desarrollamos distintas zonas de realces que ayudan a mantener el pie en una posición normal”.

Además de estas características ergonómicas, Flop tiene diversos puntos de ajustes en su cerramiento, lo que posibilita que el usuario lo adecue según el nivel de hinchazón que presenten sus pies.