Las células madre pluripotentes inducidas (iPS) tienen la capacidad de diferenciarse en cualquier tipo de célula del organismo, por lo que podrían ser utilizadas para crear órganos y tejidos sanos con los que reemplazar a aquellos deteriorados por una lesión o enfermedad. En los últimos años permitieron crear “mini-retinas”, “mini-estómagos” y “mini-hígados” a partir de ellas, pero ahora investigadores del Hospital General de Massachusetts en Boston (EE.UU.) dieron un paso más al crear segmentos del intestino delgado.

Este órgano fue trasplantados en un modelo animal –ratas–, y mostró su capacidad para liberar nutrientes al torrente circulatorio. Es decir que fue capaz de llevar a cabo, si bien parcialmente, la digestión.

Harald Ott, director de esta investigación publicada en la revista Nature Communications y reproducida por ABC Salud, señaló que con su trabajo se cerró la brecha entre la diferenciación celular –promoviendo que las células madre se transformen en un tipo específico de célula– y la generación de un tejido que muestra una funcionalidad de alto nivel.

“Si bien estudios previos han documentado la diferenciación exitosa de organoides a partir de iPS, nuestro trabajo describe una tecnología que posibilita que estas pequeñas unidades de tejido formen injertos de mayor escala que un día podrían usarse para el reemplazo de órganos”, indicó.

El trasplante del intestino delgado suele ser un problema recurrente, debido a que el número de donantes está muy por debajo de la demanda. Es por eso que desde hacía tiempo se estaba buscando una alternativa.

Esta técnica en particular consiste en tomar un órgano y eliminar todas las células, lo que da como resultado una estructura formada por la matriz extracelular que puede “rellenarse” nuevamente con las células apropiadas.

La investigación está todavía en fase de prueba, pero los científicos estiman que los segmentos a partir de iPS humanas podrían algún día ofrecer una alternativa más accesible que los trasplantes de intestino delgado.