El seleccionado argentino de fútbol superó otra vez a su par de México, por 2-0, en el segundo amistoso de preparación que ambos conjuntos asumieron en esta fecha FIFA en la que se interrumpió la actividad oficial local.
En el estadio Malvinas Argentinas de Mendoza, el equipo dirigido en forma interina por Lionel Scaloni se impuso con los goles convertidos por Mauro Icardi (Pt. 1m.) y Paulo Dybala (St. 41m.), dos de los puntales del lógico recambio post Rusia 2018 que conquistaron sus respectivos primeros tantos con la camiseta celeste y blanca.
El viernes pasado, en Córdoba, el equipo argentino se impuso ante el mismo rival por idéntico marcador, con los goles de Ramiro Funes Mori e Isaac Brizuela en contra de su valla.
El gol tempranero de Icardi otorgó tranquilidad al conjunto local. Cuando apenas transcurría un minuto y después de un pelotazo largo del arquero Rulli, el delantero del Inter se asoció con Lamela y buscó la descarga para aparecer en el área y despachar un violento remate que se tradujo en la apertura.
El equipo de Scaloni, con la diferencia a su favor, siguió controlando las acciones, pese a que le cedió el balón a su adversario.
Pero el combinado mexicano, con bajas porque distintos futbolistas que actúan en clubes de Europa no se quedaron para este ensayo, tuvo nula profundidad y casi siempre culminó sus maniobras de la misma manera: centros pasados que no fueron conectados por nadie.
Argentina, sin tanta verticalidad, mostró grageas de fútbol cada vez que la pelota pasó por los pies de Lamela, pero lucieron contenidos tanto Meza como Pereyra. Así, el desarrollo se volvió bastante previsible. Y nunca sacudió la modorra.
Mientras tanto el público, que ocupó el 80 por ciento de la capacidad del estadio, pareció acoplarse a lo que sucedía en el campo de juego: vivió el duelo casi en silencio, sin alentar demasiado y sin siquiera pedir por un Lionel Messi, que vaya uno a saber cuándo resolverá regresar, más allá de las versiones que lo dan otra vez con la 10 en los encuentros de preparación de marzo venidero.
El segundo tiempo, con las modificaciones exhibidas por ambos entrenadores, el partido entregó mayor displicencia y un ritmo mucho más cansino.
Argentina ganó una mejor distribución del balón con la entrada de Paredes (el único futbolista que estuvo en los 6 partidos que lleva el interinato de Scaloni) y mostró el debut de Paulo Gazzaniga (26 años, Tottenham, Inglaterra). Esas fueron las incidencias más destacadas de un partido que fue tornándose cada vez más monótono.
México, con el ingreso de Jesús Gallardo (lo más criterioso y peligroso desprendiéndose por la izquierda), estuvo cerca del empate. Precisamente, el lateral-volante de Monterrey se perdió el 1-1 con un cabezazo que resolvió bien el ingresado Gazzaniga.
Pero el broche de la noche llegó hacia el cierre con la entrada de Dybala que sacudió la modorra de la multitud. El hoy jugador de la Juventus fue ovacionado (el único en la calurosa noche cuyana) y apareció para sacarse la mufa como había ocurrido en el primer tiempo con Icardi. El ex Instituto aprovechó una cesión rápida de Simeone y definió en libertad para sentenciar el pleito.
El resultado le otorgó tranquilidad a este proceso interino de un Scaloni que asoma cada vez más cercano a ser ratificado por AFA para seguir al frente del combinado hasta la Copa América Brasil 2019.