Para los adolescentes las redes sociales, las herramientas online, los dispositivos electrónicos y la navegación por internet es algo sumamente común. Sin embargo, existen otras generaciones con un conocimiento limitado de las TIC, que observan cómo poco a poco las actividades de su vida cotidiana se reorganizan en torno a la tecnología, y al no disponer de un gran manejo, cometen frecuentes errores en su uso.
Esto último resulta particularmente peligroso en el caso de los profesores, que dentro de ambientes educativos deben formar a los estudiantes para las profesiones del futuro. Teniendo en cuenta que el mundo será tecnológico, la educación debe adecuarse a esta realidad.
El sitio Universia destacó cinco errores respecto al uso y aplicación de las TIC en el aula que los docentes deben dejar de cometer:
1) No planear: incorporar dispositivos pero no estrategias de uso, olvidando la importancia de las mismas para definir el destino de las lecciones.
2) Negarse a entender: puede que al comienzo resulte complejo entender determinados aspectos, pero ante ello, la mejor actitud posible es la positiva. Negarse a aprender, preferir manejarse de manera constante mediante formas antiguas con las que los alumnos no conectan puede afectar seriamente la formación de los mismos.
3) Perseguir modas: si bien es cierto que la innovación de los métodos educativos es esencial, la tecnología avanza a un ritmo más rápido que los propios docentes y sus procesos de adaptación. Perseguirla para mantenerse siempre al día con los últimos avances puede ser una verdadera pérdida de tiempo.
4) Monopolizar la lectura: si incorporás tecnología, pero únicamente para mandar a tus alumnos a leer, el sistema de enseñanza continúa igual que antes. El uso de la tecnología se asocia directamente a los espacios multiplataforma y la diversidad de opciones.
5) No escuchar: los alumnos pueden enseñar mucho a sus docentes sobre el uso de las TIC en el aula. Para ello, los profesores necesitan aprender a escuchar sus necesidades y opiniones.