Después de la polémica que supuso Uber, ahora los taxistas rosarinos se enfrentan a una nueva app telefónica de servicio de transporte. Se llama Cabify y desde septiembre funciona en Buenos Aires. Desde mayo estaría operativa en la ciudad.
A diferencia de Uber, la aplicación opera dentro del marco regulatorio que rige para remises; es decir, que la tarifa sería un 30 por ciento más cara que los taxis que se toman en la calle. Los trayectos se cobran por kilómetro recorrido y no por el tiempo que se demore en llegar. Además hay un precio mínimo pero cada semana se publican descuentos promocionales.
Consultados por el periodista Juan Pedro Aleart, del programa De 12 a 14 (El Tres), José Iantosca y José Tornambé de la Cámara de Titulares de Licencias de Taxis de Rosario (Catiltar), se pronunciaron en contra de la app fundada en España en 2011.
Señalaron que supone un obstáculo más al tachero que sale a la calle y tiene que hacerle frente a una tarifa que, aunque se aumentó hace poco, todavía sigue lejos de lo que arrojó el estudio de costos.
¿Cómo funciona Cabify?
La plataforma disponible para iOS y Android requiere ingresar el usuario y solicitar el servicio que se desea. Según publicó Infobae, las opciones varían según el país. En el caso de Argentina hay dos categorías de automóvil: Lite, que son vehículos de mediana categoría y menos de cinco años de antigüedad; o Executive, que son autos de alta gama y con menos de tres años de antigüedad. Se puede pagar por tarjeta o PayPal e incluso el pasajero indicar si quiere que se le abra la puerta o que el aire acondicionado esté encendido.
También se pueden reservar viajes, es decir contratar el servicio con antelación.