¿Intento de robo o ajuste de cuentas? Mientras se investiga el crimen del ex concejal de San Lorenzo Luis Lovato, ocurrido este lunes en su casa, el senador Armando Traferri –para quien la víctima trabajaba en la actualidad– sugirió que el hecho pudo haber sido premeditado a modo de venganza, por parte de delincuentes a los que Lovato denunció de haberlo asaltado la semana pasada.
En contacto con Radio 2, Traferri evitó hablar en firme de cualquier hipótesis pero señaló: “Tengo entendido que hay testigos que escucharon que esta bandita –por la del primer hecho– iba a volver y lo iba a ejecutar, porque los delató”.
La referencia del legislador justicialista, que habló con el programa La primera de la tarde, es a que el ex concejal, que ahora se desempeñaba como asesor suyo, “había reconocido a dos y los denunció” después de un robo sufrido pocos días atrás.
Además, Traferri reveló que Lovato planeaba “llamar a un concejal para que le solucionara un problema que se daba a metros de la casa de él, un paso clandestino de la vía donde aparentemente reducen cosas robadas”, aunque no precisó si ese presunto delito podía tener relación con los dos ataques que sufrió su asesor.
“Estaba muy molesto porque no tenía respuestas, y aparentemente una bandita lo tenía a maltraer”, agregó el también ex intendente sanlorencino en diálogo con el periodista Sergio Roulier.
Consultado sobre la posibilidad de que, al margen de estas pistas, el crimen pudo haberse producido en el marco de un intento de robo en la casa del fallecido, Traferri señaló: “Me parece que hay unas pertenencias que no están”.
En otro orden, el senador opinó que “a veces el sistema judicial deja mucho que desear”, ya que, a su juicio, no se procedió correctamente tras el asalto de días anteriores contra Lovato, a pesar que “estamos hablando de gente con prontuarios”.
En ese sentido, criticó los “excesivos derechos que se les dan a los delincuentes” en ciertos casos y remató: “Desde que soy senador llevo sufridos ocho robos, uno de ellos un asalto con un cuchillo a mi señora”.
Luis Lovato, de 61 años, vivía junto a su familia en una vivienda de calle Entre Ríos al 1600 de la ciudad de San Lorenzo, donde este lunes por la madrugada ingresaron cuatro delincuentes. El dueño de casa intentó resistir la embestida y en ese forcejeo recibió un disparo en una axila que derivó en su muerte.
Según fuentes policiales, en la casa también estaban la esposa, el hijo de Lovato, que se encerraron en el baño junto a una mujer mayor que también estaba en el lugar.
