Oprah Winfrey emocionó a todos este domingo con un apasionado discurso en la entrega de los Globos de Oro que resumió la postura de las actrices de Hollywood sobre la violencia machista y racial en el medio. "Se les acabó el tiempo", enfatizó la presentadora de televisión sobre los "hombres poderosos y brutales". Su alocución fue uno de los momentos más esperados, al tratarse de un ícono del mundo del espectáculo estadounidense; sobre todo a partir de los casos de acoso sexual contra el productor Harvey Weinstein que dio a conocer muchos otros nombres y sectores.
Según informó EFE, Winfrey recibió el premio Cecil B. de Mille por ser "un ejemplo a seguir para mujeres y jóvenes", además de "una de las mujeres más influyentes de nuestro tiempo". Meryl Streep, Denzel Washington, George Clooney y Jodie Foster son otros de los artistas que han recibido el mismo reconocimiento en años anteriores.
La también productora y empresaria empezó recordando cómo cuando era un niña vio en la tele la ceremonia de los Óscar en la que ganó Sidney Poitier. Estaba en la cocina de su casa y su madre regresaba en ese momento, agotada, de limpiar casas.
"Soy consciente de que habrá alguna niña viendo ahora como yo me convierto en la primera mujer negra en recibir este premio", dijo Winfrey, que quiso dedicar su premio a esas niñas y a las mujeres que han alzado su voz contra los abusos y las injusticias.
Recordó el caso de Recy Taylor, una mujer negra que en 1944 fue secuestrada, violada y abandonada por seis hombres blancos que nunca fueron condenados y que murió hace solo diez días.
Y quiso agradecer la labor de la Asociación de la Prensa Extranjera de Hollywood (HFPA). "Sabemos que la prensa esta siendo atacada, pero es la entrega de la prensa para sacar la verdad a la luz lo que impide que siga creciendo la corrupción y la injusticia".
"Hablar y decir la verdad es la herramienta mas poderosa que tenemos todos", dijo la presentadora, que se declaró especialmente "inspirada y orgullosa por las mujeres que se han sentido empoderadas para hablar de sus experiencias".
En concreto de las que este año han hablado en Hollywood de un problema, el de los abusos sexuales, que afecta a todas las culturas, países, sectores y razas, y que han sufrido mujeres que han tenido que aguantar "años de acoso y maltrato porque tenía hijos que alimentar, facturas que pagar y sueños que hacer realidad".
"Time's Up" ("Se acabó el tiempo"), repitió Winfrey. Un lema que es el nombre de un fondo lanzado por más de 300 mujeres de Hollywood destinado a ayudar a mujeres menos privilegiadas que ellas a defenderse de posibles abusos sexuales en el entorno laboral.
Y se mostró esperanzada en la capacidad de los seres humanos de "mantener viva la esperanza de un mañana mejor incluso en las noches más oscuras".
"Tenemos por delante un nuevo día y cuando finalmente amanezca ese nuevo día será gracias a muchas mujeres, muchas de las cuales están en esta sala, y muchos magníficos hombres que van a luchar unidos para garantizar que llegue el momento en el que nadie tenga que decir, nunca más, 'yo también'", finalizó Winfrey ante un auditorio emocionado y puesto en pie.
Candidata al Óscar y al Globo de Oro por su papel en "The Color Purple" ("El color púrpura", 1985), Winfrey recibió en 2012 el premio Jean Hershot de la Academia de Hollywood por su trabajo humanitario.