Según un nuevo estudio dirigido por investigadores del Colegio Universitario de Londres (Reino Unido), la ingesta moderada de alcohol tiene efectos positivos a largo plazo sobre la salud cardiovascular. Y por el contrario, y cuando menos en los varones, el abuso del alcohol provoca un envejecimiento prematuro de las arterias, aumentando, y mucho, el riesgo de aparición de enfermedades cardiovasculares, según el sitio abc.

Como explica Darragh O’Neill, director de esta investigación publicada en la revista "Journal of the American Heart Association", "se ha sugerido que la ingesta de alcohol podría incrementar los niveles de lipoproteínas de alta densidad o ‘HDL’, esto es, el denominado ‘colesterol bueno’, o reducir la agregación plaquetaria. Y en el otro extremo, el consumo excesivo de alcohol parece activar ciertas enzimas específicas que pueden dar lugar a la acumulación de colágeno, lo que a su vez puede exacerbar la rigidez arterial".

En definitiva, beber alcohol con moderación parece proteger nuestras arterias, mientras que beber en exceso acelera su envejecimiento. Entonces, la pregunta es, ¿cuál es la cantidad exacta o aproximada en la que el alcohol deja de ser beneficioso y empieza a dañar las arterias? Pues la verdad es que a día de hoy aún no se sabe. Todo ello a pesar de la importancia, vital, que tendría este conocimiento para la salud pública. No en vano, como recuerdan los autores, "la enfermedad cardiovascular continúa siendo la primera causa de mortalidad en todo el mundo, causando en torno a una tercera parte de todos los decesos globales".