Aunque se había advertido que los resultados estarían muy tarde, el escrutinio provisorio de las primarias abiertas, simultáneas y obligatorias se realizaba a paso muy lento. Los rosarinos se fueron a dormir sin una tendencia confirmada por los datos oficiales ya que solo se habían difundido hasta las primeras horas del lunes números de mesas testigo de las fuerzas políticas. Muchos dirigentes de la oposición se quejaron por esa demora y hasta el gobernador Miguel Lifschitz mencionó el tema en su discurso de Santa Fe.
Después de la medianoche, el sitio web de resultados oficiales sólo tenía cargado poco más del 30 por ciento de los votos escrutados. Y hasta ese punto se había llegado casi por goteo: por ejemplo, a las 20.30 recién se conocía el 1,25 por ciento de las mesas para los rubros intendente y concejales de Rosario. Una hora más tarde había subido ese porcentaje pero a sólo 3,1 por ciento.
Hacia las 22, cuando debería haber una tendencia firme, sólo se conocía 4,5% de las mesas escrutadas y al filo de la medianoche, se tenía sólo el 20% de las mesas computadas para la categoría a intendente de Rosario. Una carga lentísima, como pocas veces en elecciones provinciales con el sistema de boleta única.
A partir de la medianoche, al menos en los resultados de Rosario, con el 20 por ciento de los votos cargados, Javkin comenzó a superar a Verónica Irizar. Ese dato que fue mencionado con suspicacia por candidatos que denunciaban la lentitud en la carga.
La concejala peronista Norma López fue la primera en manifestar enojo por la falta de resultados entrada la noche del domingo y luego también se sumaron sus pares Roberto Sukerman; Carlos Cardozo, de Cambiemos; y hasta los frentistas Pablo Javkin y María Eugenia Schmuck.
Desde Santa Fe, el gobernador Miguel Lifschitz hizo mención a la demora en la carga de datos. Fue lo primero que dijo en su discurso: “Hay ansiedad de los candidatos pero el proceso se realiza con normalidad”, aseveró.