El presidente de la Cámara de Diputados de Santa Fe, Antonio Bonfatti, recordó que este jueves se cumplieron 5 años de la balacera contra su vivienda, ocurrida cuando era gobernador. "Fuimos maltratados. Se instaló la infamia del «narcosocialismo», y algunos legisladores mediáticos asociaron aquella balacera con un presunto vínculo de nuestro gobierno con el narcotráfico. No hubo un solo elemento real que pueda justificar la canallada de asociar mi nombre con el narcotráfico, pero lo hicieron", señaló.
Bonfatti publicó una carta a través de su cuenta de Facebook, donde se refirió a los 20 disparos que impactaron contra su domicilio de barrio Alberdi, cuando estaba con su esposa en el interior del inmueble. "Aquel hecho, que claramente puso en riesgo nuestras vidas, alteró definitivamente nuestros hábitos familiares y nuestras costumbres de vecinos comunes. Desde esa noche, nunca más pudimos volver a desarrollar nuestras actividades con la serenidad con la que solíamos hacerlo, ni volver a vivir sin custodia policial. Nunca más volvimos a vivir en plena libertad", agregó.
Para el ex gobernador, el atentado implicó "un mensaje mafioso para toda la dirigencia política santafesina decente" por parte de organizaciones delictivas. "Aquello fue uno de los hechos de violencia política más graves que recuerde nuestra historia democrática. Y, sin embargo, significó para nosotros un calvario que se fue multiplicando por la especulación y el aprovechamiento sectorial", indicó.
El presidente la Cámara Baja resaltó que es el primer interesado "en saber quiénes fueron (los autores) y por qué" lo atacaron. Agregó que al estar en el interior de su casa cuando ocurrió la balacera no pudo reconocer a ningún sospechoso. "Fuimos víctimas de un atentado, y nos encontrábamos imposibilitados de salir a la calle para observar a nadie", remarcó.
"Es preciso aclarar que el avance de la investigación judicial permitió que dos delincuentes sean condenados. Fuimos acusados falsamente por algunos dirigentes opositores y algunos medios, que señalaron que aquella imposibilidad de identificación implicaba el desistimiento de la acción de persecución a los culpables", comentó.
"No sólo fuimos víctimas de aquel tremendo atentado, sino que con el correr de los meses, recibimos una serie de imputaciones públicas, interpretaciones mediáticas y manipulaciones políticas sobre nuestro accionar en sede judicial que nos puso de manera infundada bajo el foco de la sospecha, multiplicando el agravio", señaló.
Según Bonfatti, al ataque del que fueron víctimas "se agregaron otros atentados sutiles". "Dañaron, y continúan dañando severamente nuestro honor y nuestro nombre. Fuimos maltratados. Se instaló la infamia del «narcosocialismo», y algunos legisladores mediáticos asociaron aquella balacera con un presunto vínculo de nuestro gobierno con el narcotráfico. Otros, con oportunismo electoralista, utilizaron a sectores de la prensa nacional para difamar y mentir sobre aspectos de mi vida laboral y personal, inventando situaciones que nunca existieron", sostuvo.
"No hubo en estos cinco años –ni lo habrá–, un solo elemento real que pueda justificar la canallada de asociar mi nombre con el narcotráfico, pero lo hicieron. Nunca recibí un solo pedido de disculpas por aquellas difamaciones. No hay una sola razón para que quienes lo hicieron, tengan un mínimo motivo para sostener los agravios. Propagaron las infamias y cuando los hechos los desmintieron, callaron", manifestó en una parte de su texto.
"A cinco años de aquella balacera, estamos de pie y con la convicción de que tenemos que seguir trabajando para mejorarle la vida a quienes confiaron los destinos de una provincia, que aún en plena crisis política, social y económica, no ha tomado ninguna medida en contra de los intereses y las necesidades de sus ciudadanos", concluyó.