Ante la aparición de casos confirmados de viruela símica en Rosario y la región, el centro de Tecnología en Salud Pública (CTSP) dependiente de la facultad de Bioquímicas de la UNR comenzó a analizar las pruebas PCR de los pacientes con síntomas compatibles para esta enfermedad.

Cabe aclarar que los testeos se realizan tanto en el hospital Centenario como en cualquiera de los dispositivos de la red de centros de salud del sur provincial a partir de la orden de un profesional de la salud que considere que el paciente sea considerado un caso sospechoso. Una vez tomada la muestra, la misma se envía al laboratorio de alta complejidad que funciona en la sala 9 del Centenario.

La viruela símica es una enfermedad causada por un virus similar al de la viruela y es considerada una zoonosis viral, es decir, puede transmitirse de distintos animales (ratas, ratones, hámster y ardillas) a los humanos, aunque se propaga fácilmente de persona a persona. 

En la ciudad de Rosario se registraron 2 casos confirmados, sin fallecidos. A modo de prevención, desde el laboratorio de la facultad de Bioquímicas difundieron una serie de recomendaciones a tener en cuenta para prevenir el contagio.

Transmisión de la viruela símica:

La transmisión de persona a persona puede producirse por contacto cercano directo con lesiones cutáneas o mucosas de una persona enferma, especialmente contacto estrecho sexual, con objetos contaminados recientemente (ropa, sabanas, toallas, etc.) y probablemente con secreciones de las vías respiratorias de corto alcance que requieren contacto cercano prolongado. 

Síntomas:

El período de incubación de la viruela símica puede oscilar entre un rango de 4 a 21 días y la enfermedad tiene los siguientes síntomas típicos: período prodrómico (fiebre, linfadenopatías, decaimiento, dolor de cabeza o muscular) seguido luego de la aparición de lesiones cutáneas (ampollas y pústulas en la piel y/o lesiones úlceras, todas muy dolorosas). Asimismo puede presentar signos y síntomas atípicos como lesiones en la piel (localización genital, anal, perianal, perineal u oral) sin un periodo prodrómico o inicial de la enfermedad.

Las lesiones son mayormente vesiculopustulosas, úlceras múltiples o únicas y maculares.

Cuidados en caso de presentar síntomas:

Ante la detección de lesiones en el cuerpo, consultar rápidamente a un centro de salud y evitar el contacto físico con otras personas. Todo caso sospechoso o confirmado debe realizar aislamiento estricto hasta obtener el resultado del laboratorio. Durante este período se debe utilizar barbijo quirúrgico bien ajustado, cubriendo nariz, boca y mentón y evitar el contacto con personas inmunodeprimidas, personas gestantes, niños y niñas durante el período de transmisión.

Las personas convivientes deben evitar el contacto con el caso sospechoso o confirmado, especialmente contacto de piel con piel. Se recomienda el uso de barbijo y distanciamiento siempre que no sea posible el aislamiento. No se debe compartir ropa, sábanas, toallas, cubiertos, vasos, platos, mate, etc. 

El diagnóstico confirmatorio se realiza mediante la detección de ácidos nucleicos del virus utilizando la técnica de PCR en tiempo real. El tipo de muestra recomendada es el material de la lesión cutánea, que incluye: hisopado del contenido vesicular, costras de lesiones e hisopado rectal (en caso de proctitis).

Vacuna contra la enfermedad:

Se estima que la vacunación contra la viruela común podría brindar protección cruzada contra la viruela símica, aunque en Argentina la vacunación contra la viruela finalizó en el año 1978 cuando se erradicó la enfermedad. Actualmente existe una nueva vacuna para la prevención de la viruela símica aprobada en Canadá, y en Estados Unidos.