Un tribunal chino impuso a una mujer el pago de una multa equivalente a unos 850 dólares. Molesta, cumplió el veredicto pero llevando una enorme caja con 60.000 monedas que pesan casi 140 kilos, para pagar. Sucedió en la provincia de Guangxi.
La joven china, identificada como Mo, se limitó a decirle al personal del tribunal que llamara a su demandante para que fuese a recoger las monedas, por un valor de 850 dólares.
Para su pesar, el juez le ordenó llevarse de vuelta cuanto había consignado y pagar el importe de la multa por transferencia bancaria.
Según publicó RT, el pasado mes, Mo fue obligada a pagar 6.000 yuanes a una empresa de decoración a la que había contratado para renovar su tienda, para luego cambiar de opinión y negarse a cancelar el monto establecido en el contrato.