Violeta Leunda Tosi es una rosarina docente de la Facultad de Veterinaria. Está varada en Bombay, en la India, junto a su marido discapacitado y otra pareja amiga. Viajaron a ese país el 6 de marzo, “cuando en Argentina ni se hablaba del coronavirus”, dice. Salieron de Calcuta en un “vuelo surrealista” y llegaron a Bombay, donde pasan los días en un hotel lleno de médicos y policías, a pocas cuadras del asentamiento más grande de Asia, donde “los casos de coronavirus se han disparado”, advierte. En teoría, tendría un vuelo de regreso a Argentina el próximo 20 de mayo, pero el avión saldría desde Nueva Dehli, a 1.500 kilómetros de donde está ella y en un país “cerrado y raro”.
Violeta habló en el programa Radiópolis (Radio 2) este viernes. Contó que viajó a la India antes que comenzara la cuarentena. Cuando quiso volver, el 22 de marzo pasado, no la dejaron regresar al país y sigue allá junto a su esposo, su cuñada y el marido.
Es profesora de la Facultad de Veterinaria de la Universidad Nacional de Rosario y comentó que dicta clases a sus alumnos y que ya tomó exámenes virtuales desde la India.
“Nosotros nos fuimos antes de que se decretara la pandemia, ni siquiera se hablaba del coronavirus en la Argentina, fue el 6 de marzo”, inició la nota. Y agregó que “incluso visitamos a un médico infectólogo antes de salir por lo que se estaba hablando en otros países y nos dijo que no íbamos a tener ningún tipo de problemas”.
“Llegamos acá a India y cuando estábamos en Calcuta nos enteramos de que Argentina había empezado a cerrar”, siguió Violeta. “Logramos salir de Calcuta en el último avión, fue muy raro, surrealista, viajamos ocho personas en un avión gigantesco. Llegamos a Bombay y quedamos acá”, describió después.
Con resignación, la veterinaria señaló que “teóricamente habría un vuelo a la Argentina el 20 de mayo, pero no tenemos ninguna confirmación. Lo que pasa es que ha habido tantos rumores, que no tenemos ninguna esperanza hasta que estemos arriba del avión”.
Y aclaró que “tendríamos que ir hasta Nueva Dehli para tomar ese vuelo, que está a 1.500 kilómetros, e India está cerrado totalmente”.
“Un país muy raro”
Violeta apuntó que “para quien no conoce India, es un país muy raro. Por ejemplo, si nosotros nos enfermamos aquí, tenemos de 3 a 4 días para ingresar a una cama en un hospital”. Y relató que “acá se está disparando la enfermedad”.
Acerca de su situación y la de quienes la acompañan, indicó que “estamos en un hotel donde se alojan los médicos y los policías, no tenemos opción”. Y sentenció: “Estamos como sentados arriba de una bomba de tiempo”.
Respecto de los gastos, aseguró que no tienen “ningún tipo de ayuda” y que “tenemos que pagar todo nosotros, nuestras tarjetas de crédito explotaron, no hay forma de soportar este gasto ya”.
Luego precisó: “Estamos gastando 100 dólares por día, que tienen el impuesto país del 30 por ciento. Estamos comiendo pan, tomate y alguna fruta”. Y añadió que “una pizza nos cobraron 1.850 pesos el otro día”.
Alimentando cuervos
“Yo en este momento estoy caminando por el pasillo del hotel; mi día a día es darle de comer a un perro y los cuervos, no puedo con mi carácter”, confió la docente de la UNR y médica veterinaria.
Después describió que “acá en India tenés unos hoteles hermosos y las villas más pobres y grandes del mundo. Estamos a unas cuadras de la villa Dharavi, que es la más grande de Asia con más de un millón de habitantes. Allí se están disparando los casos”.
Violeta dijo que “seremos unos 280 argentinos acá”. Y pensando en un posible viaje de retorno al país, apuntó que “conseguir un salvoconducto acá en India para viajar a Nueva Dehli es terriblemente burocrático, no sé cómo vamos a hacer”.
Luego dio detalles de su situación especial: “Con mi marido tenemos una situación particular, mi marido es discapacitado y pusimos una cautelar en la Comisión Interamericana de Derechos Humanos que todavía no fue contestada”, expresó.
Y cerró: “La estamos pasando muy mal y es terriblemente caro. Más de un compatriota está comiendo de ollas populares”.