Astrónomos prevén que un sistema estelar a 3 mil años luz de la Tierra se haga visible a simple vista en cuestión de meses por la explosión de la nova recurrente T Coronae Borealis, o T CrB, que está formado por una estrella gigante roja y una enana blanca que orbitan entre sí.
Cuando la enana blanca roba suficiente material estelar de su compañera gigante roja, provoca un breve destello de fusión nuclear en su superficie, lo que desencadena lo que se conoce como estallido de nova, según publicó el sitio especializado Space.
El estallido será visible en la constelación de la Corona Boreal, también conocida como Corona del Norte, que forma un semicírculo de estrellas. Se espera que el estallido ocurra entre febrero y septiembre de 2024 y aparezca tan brillante como la Estrella Polar en nuestro cielo nocturno durante no más de una semana antes de desvanecerse nuevamente, dijeron funcionarios de la Nasa en un comunicado. "Esta podría ser una oportunidad de observación única en la vida, ya que el estallido de nova sólo ocurre aproximadamente cada 80 años", agregaron.
Dla miłośników tego, co ładne na niebie - T Coronae Borealis, układ podwójny złożony z dwóch stetryczałych gwiazd, czerwonego olbrzyma i białego karła; z Ziemi gołym okiem nie widać, bo oba już ledwo świecą i dość daleko (mniej więcej 3 tys. lat świetlnych), ale ma to wszelkie… pic.twitter.com/oLNv5zXw4b
— kapitan.kirk (@KirkKapitan) March 13, 2024
Esta nova recurrente, que explotó por última vez en 1946, es sólo una de las cinco observadas en la Vía Láctea. Para detectar el estallido, los espectadores deben dirigir su mirada hacia la Corona Boreal, que se encuentra entre las constelaciones de Boötes y Hércules. El estallido aparecerá como una "nueva" estrella brillante en el cielo nocturno.
An #artist's concept of the binary #star system known as T #Coronae Borealis, in which a white dwarf star will burst with bright light after #siphoning material from its larger red giant star companion. pic.twitter.com/y9yGsJql2u
— Wioletta (@wiolettajadach) March 14, 2024
Generalmente, estas estrellas binarias tienen una magnitud de +10, que es demasiado tenue para verla a simple vista. Sin embargo, durante el estallido, el sistema estelar tendrá una magnitud de +2, que es comparable al brillo de la Estrella Polar, Polaris, según el comunicado. "Una vez que su brillo alcance su punto máximo, debería ser visible a simple vista durante varios días y poco más de una semana con binoculares antes de que se atenúe nuevamente, posiblemente durante otros 80 años", dijeron funcionarios de la Nasa.
El explosivo par estelar está formado por una enana blanca (un remanente estelar relativamente pequeño y denso) y una estrella gigante roja más grande en las últimas etapas de la evolución estelar, lo que significa que su atmósfera exterior está inflada y es tenue. Las estrellas unidas gravitacionalmente están lo suficientemente cerca como para que, a medida que la gigante roja se vuelve inestable debido al aumento de temperatura y presión, expulsa sus capas externas sobre la enana blanca. La acumulación de materia calienta la densa atmósfera de la enana blanca lo suficiente como para desencadenar una reacción termonuclear que produce la nova que vemos desde la Tierra. Este ciclo continuará una vez que la nova también se atenúe y la enana blanca recolecte suficiente materia para crear otro estallido.
Dónde y cuándo hay que mirar
Concretamente, lo que se podrá observar en el cielo es el estallido del sistema estelar T Coronae Borealis o T CrB, que explotó por última vez en 1946, en la constelación Corona Boreal o Corona del Norte, un pequeño arco semicircular cerca de Bootes y Hércules. Es hacia este punto del espacio donde hay que mirar para observar el fenómeno, que tendrá un brillo parecido a la Estrella Polar.
Para encontrar la nova en el cielo nocturno habrá que mirar hacia la Corona Boreal la cual se puede localizar con una aplicación para mirar las estrellas. T CrB es solo una de las cinco novas recurrentes de nuestra galaxia, junto con RS Ophiuchi, V1500 Cygni, V838 Monocerotis y V339 Del, descubierta en 2013.
Por otro lado, en el hemisferio sur será visible en zonas que no se encuentren en latitudes más al sur de 65°. Por el momento, los astrónomos no saben la fecha exacta en que ocurrirá la nova, pero se espera que la Nasa entregue más detalles.