Las consecuencias del severo temporal que afectó a Rosario el miércoles de la semana pasada todavía se sienten en algunos lugares de Rosario. Es el caso de los vecinos de Machaín y Comercio, un sector de barrio Sarmiento en la zona norte, que expresaron su preocupación por un techo de chapa de importantes dimensiones que quedó suspendido sobre los cables de electricidad, en medio de la tormenta, y que sigue allí casi siete días después. 

“Desde la semana pasada quedó así, está sostenida por una columna. Ya hicimos la denuncia al 103”, explicó una mujer que vive en la planta alta de la casa que está justo en esa esquina. Según relató, la chapa voló por efecto de las intensas ráfagas de viento que se desplegaron sobre la ciudad el miércoles pasado a la mañana. 

El pedazo de techo, aparentemente desprendido de una vivienda contigua, cayó sobre una columna y quedó sostenido por el cableado eléctrico. Junto a la mujer también se expresaron otros vecinos, preocupados por el tiempo que transcurrió desde el temporal sin que Defensa Civil pudiera retirar la chapa, pese a que ya fueron a relevar el caso. 

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“En el barrio se notan las deficiencias con las tormentas”, advirtió un hombre que vive en la zona en relación a problemas que observa con la luz, el arbolado y las zanjas. “Lo de los cables y la chapa es un peligro”, agregó, en relación especialmente a que rige un nuevo alerta amarillo por tormentas fuertes para este martes.

El reclamo de este grupo de vecinos de barrio Sarmiento es uno de los más de mil que recibió Defensa Civil tras el temporal del miércoles pasado, que provocó anegamientos, cables y árboles caídos, y voladura de techos y materiales en distintos sectores de la ciudad, producto del viento y del gran caudal de agua en poco tiempo.

"Fue un fenómeno severo, alcanzó esa característica y dejó consecuencias cuya resolución final va a llevar varios días", advirtió en aquella oportunidad el director del área, Gonzalo Ratner, sobre las tareas de las cuadrillas municipales.