El fiscal general de Estados Unidos, William Barr, anunció la presentación de cargos criminales por narcotráfico y lavado de dinero contra el presidente de Venezuela, Nicolás Maduro. El mandatario venezolano por su parte afirma que el país del norte y Colombia pretenden “llenar de violencia a Venezuela”.
La medida supone profundizar la presión de Washington para forzar la salida del poder de Maduro, al que califica como gobernante "ilegítimo" y "dictador" y al que ahora considera también como líder de un cartel de drogas en colaboración con la exguerrilla colombiana de las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC).
Maduro negó los cargos presentados por el Departamento de Justicia de Estados Unidos, que describió como "un conjunto de acusaciones falsas" y acusó al gobierno de Donald Trump de comportarse como "cowboys racistas del siglo XIX" al ofrecer una recompensa por su captura.
"El gobierno de Donald Trump vuelve a arremeter contra el pueblo de Venezuela y sus instituciones democráticas, utilizando una nueva modalidad de golpe de Estado sobre la base de acusaciones miserables, vulgares e infundadas que intentan minimizar el alto reconocimiento que posee Venezuela en la lucha contra el narcotráfico", denunció Arreaza.
Según reporta la agencia Reuters, el ministro de Industria de Venezuela, Tareck Zaidan El Aissami, también fue acusado este jueves de evadir las sanciones impuestas en febrero de 2017 al contratar empresas estadounidenses para reservar vuelos privados y de violar la Ley de Designación de Cabecillas Extranjeros del Narcotráfico.
Según publicó la BBC, el Departamento de Justicia de Estados Unidos acusa en concreto a Maduro, entre otros cargos, de haber recibido 5 millones de dólares por parte de las FARC en 2006 cuando era canciller en el gobierno de Hugo Chávez.
No reconocido
Cuando Chávez murió en 2013, Maduro lo sustituyó. Más de 50 países no reconocen a Maduro como presidente porque consideran como ilegítimas las elecciones que ganó el dirigente en 2018.
En cambio sí reconocen como presidente desde enero de 2019 a Juan Guaidó, líder opositor y presidente de la Asamblea Nacional (Parlamento).
Además de Maduro, otros altos dirigentes acusados por corrupción, narcotráfico o lavado de dinero son Diosdado Cabello, alto cargo en el partido gobernante; Maikel Moreno, presidente del Tribunal Supremo de Justicia (TSJ); y Vladimir Padrino, ministro de Defensa.
El fiscal general Barr no quiso confirmar si es la primera acción de este tipo en la historia contra un gobernante. "No reconocemos a Maduro como presidente de Venezuela, pero esto ya pasó con (Manuel Antonio) Noriega (en Panamá a finales de los 80), a quien tampoco reconocíamos".
Barr defendió que la decisión se haya tomado pese a la actual crisis sanitaria mundial del coronavirus. "Es lo mejor que podemos hacer en este momento: hacer lo posible para que el pueblo de Venezuela pueda salir de esta gente", dijo Barr.
Cartel de "Los Soles"
Estados Unidos considera que existe una "conspiración para el narcoterrorismo" entre el llamado cartel de Los Soles, formado supuestamente por autoridades venezolanas y liderado por Maduro, y las FARC desde 1999 y hasta ahora.
Por eso acusa también a Ivan Márquez y Jesús Santrich, excomandantes de la exguerrilla colombiana que entraron en desacato con el proceso de paz firmado con el Estado colombiano. Actualmente Márquez y Santrich se encuentran en paradero desconocido tras haber anunciado su vuelta a las armas en 2019.
En total se presentan cargos contra Maduro y otras 14 personas en tribunales de Nueva York, Miami y Washington. "El régimen de Venezuela, que estuvo liderado por Nicolás Maduro, sigue infectado por la criminalidad y la corrupción", señaló Barr. "Durante más de 20 años Maduro y un alto número de aliados conspiraron supuestamente con las FARC provocando que toneladas de cocaína entraran y devastaran comunidades estadounidenses", agregó.
"Expresamente quisieron inundar los Estados Unidos con cocaína para socavar la salud y el bienestar de nuestro país", dijo por su parte Geoffrey Berman, fiscal del distrito sur de Nueva York. "Maduro utilizó deliberadamente la cocaína como arma", agregó Berman.
Tanto Maduro como Cabello, acusados de conspiración para el narcoterrorismo y de conspiración para importar cocaína a Estados Unidos, se podrían enfrentar a penas de entre 20 años de prisión o cadena perpetua.
Maduro sería el líder del cartel Los Soles, que recibe el nombre de la insignia que llevan en el uniforme militar algunos de los acusados.
En Washington se acusa al ministro Padrino, el más alto rango de las Fuerzas Armadas de Venezuela, de conspirar para distribuir cocaína a bordo de un avión registrado en Estados Unidos de 2014 a 2019.
En Miami, Maikel Moreno, presidente del Tribunal Supremo de Justicia, fue acusado de lavado de dinero y de haber recibido supuestamente decenas de millones de dólares para arreglar decenas de casos civiles y criminales en Venezuela.