Las medidas preventivas contra el coronavirus van directo al corazón del sexo. Las recomendaciones médicas limitan el contacto al mínimo roce y hacen hincapié en cuidarse al máximo a la hora tener relaciones íntimas. En este contexto de ausencia de besos y apretones de manos, la posibilidad de mantener un contacto sexual suena sumamente riesgoso. Así piensa la mayoría de los clientes de los taxi boys rosarinos que deciden cuidarse.
Consultados por Rosario3, algnos taxi boys fueron contundentes: “Estamos parados por el coronavirus. Nuestro trabajo se basa en el contacto y aunque es bueno que la gente tome conciencia, implica mucho en la economía nuestra”, señala Marcelo y detalla: “Los dos últimos fines de semana que pasaron perdí 28 mil pesos y en los próximos se me pierden 30 mil más”.
“El coronavirus me está complicando la vida, las clientas no quieren nada, no quieren contacto”, resume apesadumbrado y con mucha preocupación por el porvenir.
Martín percibe lo mismo. “El trabajo sexual es informal y como toda economía popular está siendo muy afectada por esto, como cualquier actividad que se desarrolla día a día”, analiza.
“Está muy complicado, me queda un solo un cliente fijo que es conocido y muy consciente a la hora de cuidarnos pero no más que eso”, manifiesta y añade: “Tengo compañeras cis y no binaries que no pueden concretar nada y están trabajando en Rappi”. Finalmente, lamenta: “Los clientes se repliegan en la pandemia”.
“Me pasó que muchos clientes sin que yo les escriba ni nada me avisaron que iban a ver de tomar un servicio recién en abril o cuando se calme todo. De forma pro activo ellos me avisaron que no nos íbamos a ver por unas semanas. Tengo el kiosco abierto pero los clientes no entran”, ironiza Sebastián . “Desde el lunes retomé el laburo virtual y le di con más intensidad como para, aunque sea, poder generar algún ingreso pero no es lo mismo”, manifiesta.
Sin embargo, para todos la situación es más complicada aún para las mujeres que trabajan. “Las que laburan en la calle están jodidas posta porque ya desde el miércoles nos contaron que la Policía en zona oeste las paró y les dijo que vuelvan a sus casas, que no podían estar trabajando por la cuarentena. Ahora esto es una realidad. Estas situaciones me desesperan bastante. No se cómo van a poder manejarse durante lo que dure el aislamiento”, expresa.
Cabe recordar que la Asociación de Mujeres Meretrices de Argentina (Ammar) hizo públicas una serie de recomendaciones para las trabajadoras sexuales en el marco de las medidas para evitar el contagio del coronavirus, que pueden ser tenidas en cuenta a la hora de tener sexo.
Evitar atender a clientes que estén con algún síntoma gripal, tos o fiebre.
Mantener cierta distancia al momento de la negociación del servicio.
Evitar besos.
Para el acto sexual se recomienda la posición del perrito.
Llevar siempre a mano alcohol en gel.
Utilizar para todo acto sexual preservativo.
No atender clientes que hayan llegado recientemente del exterior.
Lavarse las manos durante 20 segundos.
De ser posible, insistir en la higiene y mandar al cliente a bañar.
No compartir ni cigarrillos ni vasos.
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