Tamara Pettinato rompió el silencio este lunes luego de la filtración de sus videos con el ex presidente Alberto Fernández, en medio de la denuncia por violencia de género de Fabiola Yáñez.
"Luego de un breve silencio tengo la necesidad de aclarar algunas cosas", escribió la conductora y mediática en sus redes sociales.
Luego dijo ser "víctima de una campaña de hostigamiento producto de la publicación de un video de carácter privado en el que aparezco filmada por el expresidente Alberto Fernández".
"Las intenciones por las cuales se hace público y se difunde ese material pueden ser muchas. No me voy a detener en eso ahora”, manifestó.
“Sí, tengo que decir que desde que se publicó estoy siendo blanco de innumerables acosos y amenazas referidas a mi vida privada, plagadas de mentiras e información falsa. Algunas se pueden ver en medios de comunicación y redes sociales, otras llegan vía mensajería privada con mensajes intimidatorios, haciendo mención también a posibles nuevas difusiones", añadió en su descargo.
Tamara Pettinato dijo que las imágenes que se difundieron "corresponden a un almuerzo luego de realizar una entrevista en Casa Rosada en el marco de un trabajo documental para la televisión china sobre las relaciones de ese país con la Argentina en enero del año 2022", por lo que aclaró que "no había restricciones sanitarias en ese momento".
“Resulta obvio que conozco al expresidente y tenía un vínculo de confianza con él. Sin embargo, una cosa no quita la otra. Lo que se dice de las circunstancias en las que se grabaron esas imágenes es falso. Me están usando”, lamentó Pettinato.
“No soy ingenua y trabajo en los medios hace más de 20 años, ahora ¿no es una obviedad que están desviando el foco de atención? ¿Resulta que una denuncia por violencia de género se tapa con más violencia contra una mujer?”, agregó la conductora.
Por último, Tamara Pettinato pidió que dejen de utilizar su nombre: “Escribo esto para pedirles públicamente que se deje de utilizar mi nombre y de hacerse valoraciones morales en el marco de una situación que me excede, que se respete mi persona sin ser víctima de hostigamiento y persecución. Me ven o me escuchan todos los días en mis lugares de trabajo habituales”.