El Gobierno formalizó este lunes el cierre del Instituto Nacional de Cine y Artes Audiovisuales (INCAA), una medida que fue repudiada por todo el mundo de la cultura. En ese marco, el cineasta y docente rosarino Héctor Nene Molina lamentó la medida y remarcó que el instituto es un ente autárquico que tiene recaudación propia, es decir que no se financian las subvenciones a las películas con impuestos.
A partir de la decisión del presidente Javier Milei, los empleados del Incaa fueron licenciados en forma temporánea, como sucedió con la agencia Télam.
En la resolución número 62, el presidente del Incaa, Carlos Luis Pirovano, justifica la decisión en “el contexto de la crisis económica general e importante déficit fiscal que atraviesa el país desde hace décadas”.
A comienzos de este mes, el Ejecutivo nacional había suspendido en el Incaa “la recepción de todo tipo de proyectos que se realicen mediante el sistema de ventanilla continua, en los que se soliciten ayuda financiera del organismo, por el plazo de noventa (90) días”.
Según indicó el Gobierno en la resolución, el período de suspensión tenía como objetivo “propiciar nuevas normas de regulación del fomento audiovisual con el objeto de adecuarse a las necesidades del mundo actual en pos de una dinámica y agilidad acorde a los nuevos tiempos”.
Entrevistado por Radio 2, el Nene Molina dijo que “siguen instalando que a través del Incaa el cine argentino le está sacando el plato de comida a los niños pobres del Chaco. Es mentira. Estamos cansados de recordar que el Incaa en su mayoría se autofinancia, es un ente autárquico con recaudación propia”.
El cineasta rosarino remarcó que una película “da muchísimo trabajo” pero además es “nuestro espejo, nuestra identidad, nuestro pasaporte al mundo”.
Molina resaltó el prestigio del cine argentino en el mundo. “Lo que se genera cuando una película argentina va a cualquier festival es impresionante”, enfatizó.