El gobierno nacional dictó este lunes la conciliación obligatoria en el conflicto de los aceiteros. Con esta resolución se retoma la exportación de granos, al menos, por los próximos 15 días. Mientras tanto, en simultáneo, se reactiva la mesa de negociación entre el gremio y la cámara empresaria.
“En el día de la fecha, la secretaria de Empleo, Trabajo y Seguridad Social de la Nación, dependiente del ministerio de Capital Humano, dictó hoy la conciliación obligatoria en el conflicto de la industria aceitera que mantiene paralizada la actividad desde el día martes 6 de agosto”, sostiene el comunicado de la cartera laboral.
Con esto, se termina la medida de fuerza que tenía paralizado el trabajo portuario, por lo que los trabajadores deberán garantizar el normal funcionamiento del sector por las próximas dos semanas mientras se avanza en la discusión salarial.
“La secretaría exhorta a las partes en conflicto a mantener la mejor predisposición y apertura para negociar los temas sobre los cuales mantienen diferencias y contribuir, de esa manera, a la paz social y a mejorar el marco de las relaciones laborales en el seno de la actividad involucrada”, señalaron desde el gobierno.
Más temprano este lunes la Cámara de la Industria Aceitera y el Centro de exportadores de Cereales habían anticipado en redes sociales el pedido de conciliación. “frente a la imposibilidad de lograr recuperar el diálogo con los líderes sindicales y la negativa a permitir a los trabajadores ingresar en las plantas para retornar al normal desarrollo de las actividades”.
Este pedido de intervención de la secretaría de Trabajo echa por tierra el planteo inicial del sector empresario de que el paro era netamente político y encasilla la situación en una discusión laboral que deberá resolverse en el marco de la mesa de discusión paritaria.
Los empresarios recordaron, además, que las demandas salariales de tener un ingreso superior a la inflación ya han sido atendidas por la industria, que ofreció un 12% de aumento en julio -retroactivo- y un 5% para septiembre, llevando el total al 107% anual; y con un salario mínimo conformado superior a los $2 millones, así como un salario promedio superior a los $3 millones. “Es el momento de lograr acuerdos salariales y dejar de lado aspiraciones o cuestionamientos de políticas públicas que exceden el marco de la paritaria”, culminó el documento del sector empresarial.
El paro, que este martes iba a cumplir una semana, impactó en alrededor de quince terminales portuarias ubicadas en San Lorenzo, Timbúes, Puerto San Martín, Ramallo y Bahía Blanca, que son operadas tanto por empresas argentinas como por multinacionales.