El dueño de una agencia de viajes rusa, acusado de organizar “tours gay” dentro y fuera del país, fue encontrado muerto en su celda en Moscú mientras esperaba juicio por cargos de lo que la Justicia de ese país cataloga como “actividades extremistas”.

El cuerpo de Andrey Kotov fue descubierto el domingo con presuntos signos de suicidio en el centro de detención preventiva de Vodnik, según fuentes policiales citadas por la agencia TASS. Su muerte fue confirmada por su abogado, Leysan Mannapova, y por Eva Merkachyova, miembro del Consejo de Derechos Humanos presidencial.

Kotov, propietario de la agencia “Man Travel”, fue arrestado a finales de noviembre. La policía lo acusaba de organizar viajes que promovían “propaganda de la ideología del movimiento LGBT”.

Según TASS, un funcionario de policía aseguró que Kotov planeaba un viaje a Egipto durante las vacaciones de Año Nuevo con este enfoque.

Rusia prohibió la llamada “propaganda LGBT” en 2022, y desde entonces, el movimiento LGBT internacional fue clasificado como un grupo extremista.

Kotov, sin embargo, negó las acusaciones y afirmó que las excursiones eran completamente normales. “Mis teléfonos tienen fotos y videos de los participantes visitando museos, paseando en lancha y tomando el sol. Está claro que eran excursiones comunes. No había propaganda ni extremismo”, afirmó tras su arresto.

Según el portal RT, a lo largo de 2024, la policía rusa intensificó las razzias contra bares y clubes gay, desmantelando varios encuentros LGBT en las ciudades principales. En marzo, un tribunal en Oremburgo, cerca de la frontera con Kazajistán, ordenó el arresto de dos empleados de un club nocturno gay local.

Aunque la homosexualidad no está prohibida en Rusia, las autoridades tienen amplia discreción para interpretar lo que constituye "propaganda" de relaciones entre personas del mismo sexo, al tiempo que el presidente Vladimir Putin redobló sus críticas del estilo de vida de los países occidentales, cuyos valores considera "decadentes" y contrarios a la tradición rusa.

Valery Fadeyev, jefe del Consejo de Derechos Humanos, se excusó ante la agencia RBC por este clima de represión: “Las relaciones homosexuales y la propaganda de esas relaciones son cosas diferentes. Las primeras son una cuestión privada, y nadie interfiere en eso. Los gays siempre han existido, en todas las épocas.”