El fiscal regional Patricio Serjal presentó este domingo su renuncia a ese cargo, en medio de las sospechas de corrupción que también involucran a su par Gustavo Ponce Asahad. Sin embargo, se declara “ajeno a las cuestiones que se han ventilado”.
En una misiva dirigida al fiscal general de Santa Fe, Jorge Baclini –quien le había pedido un paso al costado–, Serjal reconoce que “los acontecimientos ocurridos los últimos días ponen de manifiesto una situación de gravedad para el Ministerio Público de la Acusación”.
“Soy ajeno a las cuestiones que se han ventilado y me he puesto a disposición de los investigadores para lo que los mismos requieran. Quiero dejar en claro que jamás he realizado actos que no se han ajustado a derecho durante mi función, hago referencia a mi actuación, desconociendo el modo en que han obrado otras personas y no siendo quién para juzgarlos”, agrega.
En la carta de dimisión, que Baclini derivará al gobernador Omar Perotti, encargado final de aceptarla, el fiscal saliente asegura entender “que en virtud de las circunstancias, es necesaria una renovación en el rol de fiscal regional, ello dada la relevancia política institucional que tiene el rol”.
Añade que “se debe velar en primer lugar por la Institución y la consecución de los objetivos planteados en el plan de desarrollo institucional, sin mezclar en ello cuestiones personales que puedan menoscabar la institucionalidad”.
Por una renuncia plena
Conocida la renuncia de Serjal como fiscal regional –cargo que ocupaba desde abril de 2017–, sus pares de la Asociación de Fiscales y Funcionarios del MPA de la provincia emitieron un comunicado donde le solicitaron que no sólo renuncie a su cargo de jefe sino también de fiscal de grado.
"Los fiscales representados por esta Asociación solicitamos que el Sr. Patricio Serjal renuncie a su cargo de Fiscal Regional como así también al de Fiscal”, señala el parte difundido por la noche.
Agregan que "las conductas asumidas por el Sr. Fiscal Regional de la 2da. Circunscripción del MPA no tienen correspondencia con el deber de transparencia que pesa sobre el MPA, ni con las prohibiciones y deberes que pesan sobre quienes detentan un cargo de Fiscal".
Serjal y Ponce Asahad están acusados de cobrar dinero a personas acusadas de cometer delitos para filtrarles información o no investigarlos.