La organización terrorista Hezbollah acusó a Israel por las explosiones de dispositivos de comunicación pagers por las que se registraba un saldo de al menos nueve muertos y 2.800 personas heridas en el Líbano y Siria, incluyendo a muchos de los miembros del grupo chiíta y a enviados de Irán a Beirut, como así también a menores de edad.
Las detonaciones tuvieron lugar en el sur del Líbano, en los suburbios del sur de Beirut conocidos como Dahiyen y en el valle oriental de Bekaa, bastiones de Hezbollah; y también en la capital de Siria, Damasco, y sus alrededores.
El ministro de Salud libanés, Firass Abiad, dijo que 2.800 personas resultaron heridas en las explosiones, y que alrededor de 200 de ellas estaban en grave estado. Entre los heridos había combatientes de Hezbollah que son hijos de altos funcionarios del grupo armado, según precisaron a Reuters dos fuentes de seguridad.
The pagers attack in Lebanon; where huge numbers of Hezbollah fighters have been injured when their pagers exploded after receiving a message is among the craziest things I have seen in this new generation of warfare.
— ScharoMaroof (@ScharoMaroof) September 17, 2024
Reportedly, the Israeli intelligence send a message to the… pic.twitter.com/Hgt0eYauY5
A través de un comunicado, la organización respaldada por Irán culpó a Israel por la explosión. "Consideramos al enemigo israelí completamente responsable de esta agresión criminal", sostuvieron en el texto citado por Reuters, y añadieron que Israel "recibirá su justo castigo por esta agresión pecaminosa".
Qué son los pagers utilizados por Hezbollah
Estos dispositivos (también conocidos como beepers o localizadores) se inventaron originalmente en Estados Unidos en la década de 1920. Se trata de un aparato que actualmente es considerado obsoleto pero que se sigue utilizando en algunas regiones del mundo, como en el caso del Líbano, y que fue clave para lo que desde Hezbollah calificaron como la "mayor violación de seguridad" a la que el grupo se ha enfrentado en casi un año de conflicto con Israel. El término “pager” fue registrado oficialmente en 1959 por la compañía Motorola, que lideró el mercado durante décadas desde el lanzamiento de su primer versión, el Pageboy 1, creado en 1964. Este modelo emitía una alerta sonora al recibir un mensaje, y ese pitido inspiró que se los llamara "beepers". Este aparato permitía enviar y recibir mensajes de texto y de voz, e interactuar a partir de una serie de botones y su pantalla de cristal líquido. Para transmitir los mensajes, los localizadores usan ondas de radio en frecuencias asignadas a cada dispositivo. A medida que avanzó la tecnología, los dispositivos se hicieron cada vez más pequeños y comenzaron a mostrar mensajes cortos, incluyendo números y palabras, en su pantalla. En las décadas del 80 y 90 ya eran muy populares. Según la compañía Spok, 61 millones de pagers estaban en circulación en todo el mundo en 1994, antes de que comenzaran a imponerse los teléfonos celulares. No obstante, algunos profesionales de la salud los siguen utilizando en hospitales de, por ejemplo, Estados Unidos. Según un estudio del Journal of Hospital Medicine de 2017, casi el 80% de los médicos hospitalarios usaban pagers para recibir mensajes fundamentalmente relacionados con la atención a sus pacientes. En el caso de Hezbollah, sus miembros usan desde hace años estos dispositivos para evitar que la inteligencia de Israel rastree sus ubicaciones, lo que se intensificó a partir de los ataques del 7 de octubre. De hecho, sus miembros tienen prohibido utilizar teléfonos celulares mientras viajan por el sur del país, cerca de la frontera con Israel. Al utilizar ondas de radio y no redes de telefonía celular, los mensajes intercambiados mediante beepers son más difíciles de interceptar. Además, permiten evitar problemas de conexión o interrupciones intencionadas. A raíz de este episodio, Hezbollah le pidió a sus militantes que descarten sus pagers. De acuerdo con distitnos especialistas consultados por CNN, hay dos posibles explicaciones para las detonaciones en cadena de estos dispositivos. Una teoría plantea que, a través de una violación de ciberseguridad, se instaló un malware que provocó que las baterías se sobrecalentaran al punto de estallar. Sin embargo, esta no es la principal hipótesis. La principal teoría habla de un "ataque a la cadena de suministro", es decir, que los localizadores fueron manipulados durante el proceso de fabricación o envío. Según algunos informes, los pagers que explotaron fueron distribuidos en los últimos días entre los agentes de la organización terrorista, lo que refuerza esta explicación. David Kennedy, un ex analista de inteligencia de la Agencia de Seguridad Nacional de Estados Unidos, le dijo al citado medio norteamericano que las explosiones que se ven en las imágenes que circulan en redes sociales son "demasiado grandes como para que se trate de un ataque remoto" para sobrecalentar las baterías. "Es más probable que Israel tuviera agentes humanos en Hezbollah", sostuvo Kennedy, y señaló que estos infiltrados habrían podido "implantar explosivos" que se activarían cuando los pagers recibieran un determinado mensaje. Paul Christensen, un experto en seguridad de baterías de iones de litio de la Universidad de Newcastle, le dijo a Reuters que el nivel de daño causado por las explosiones parecía inconsistente con los casos conocidos de fallas de baterías de este tipo en el pasado. "De lo que estamos hablando es de una batería relativamente pequeña que estalla en llamas. No estamos hablando de una explosión fatal aquí. Necesitaría saber más sobre la densidad de energía de las baterías, pero mi intuición me dice que es muy improbable", afirmó. El ataque de este martes representa un nivel de escalada en la violencia en la región que quizás sea incluso mayor al desatado por el asesinato de Fu'ad Shukr, el alto comandante de Hezbolá que murió en un ataque aéreo israelí en un suburbio de Beirut a fines de julio.Cómo se concretó el ataque explosivo