El gobernador Maximiliano Pullaro ratificó que descontará el día de paro a los docentes que no trabajen el próximo miércoles, día en que tendrá lugar una medida de fuerza de Amsafé. “Intento no hablar con los gremios. Son muy duros conmigo quienes eran blandos en el período pasado”, cuestionó en una conferencia de prensa que tuvo lugar en la capital provincial. 

“Sinceramente, no esperábamos esta actitud del sindicato, de los sindicalistas de Amsafé en principio. Creíamos que como otros gremios del Estado, la propuesta era superadora. Quiero ser claro: la recomposición salarial supera en tres puntos los índices de inflación. Es de 82 por ciento por sobre 79 por ciento”, expresó al ser consultado por la periodista Ivana Fux (De 12 a 14, El Tres) sobre la medida de fuerza del miércoles. 

El gobernador sostuvo que será el paro número trece en lo que va de su gestión. “No es una valoración, es un dato. A nivel nacional hubo dos. No creemos que sea lo correcto que pongan a los chicos y a los padres en ese lugar. El paro no se lo hacen al gobierno, se lo hacen a los chicos que pierden trece días de clases en lo que va del año”, remarcó. 

“Siempre vamos a reconocer el derecho a huelga, en este caso a Amsafé, que no son los docentes que están en las aulas. Son los sindicalistas que se pliegan a un llamado de Baradel a nivel nacional, pero acá agregan un paro. Nos vemos obligados a descontar el día a quienes acaten lo que dijo el sindicato Amsafé”, subrayó. 

Pullaro ponderó que la provincia tiene “derecho de no pagar a quien no va a trabajar”. “No va a haber sanción ni persecución administrativa. Día que se para, día que se descuenta en Santa Fe”, señaló. 

“Sentimos que el paro es injusto. En Santa Fe tenemos once mil personas que perdieron empleo en el sector privado, que no la están pasando bien. Nuestra responsabilidad es trabajar para los empleados públicos, pero también para toda la sociedad”, indicó. 

Por último, vinculó la medida de fuerza y declaraciones de gremialistas al control aplicado en la provincia para bajar las inasistencias por carpeta médica. “Nos pretenden cobrar el trabajo para corregir la asistencia. Teníamos un ausentismo muy importante y lo bajamos. Eso les molestó porque creían que era un derecho. Quien fundamenta una carpeta en algo irreal resiente el sistema”, finalizó.