Este miércoles, la provincia de Santa Fe adhirió a la ley nacional de emergencia alimentaria y social aprobada por unanimidad por el Senado de la Nación el 18 de septiembre. Reclaman al gobierno nacional más recursos para atender la demanda cada vez más de alta de comida y atención médica. El ministro de Desarrollo Social, Jorge Álvarez, dijo que los aportes en estos tres años y medio fueron “insignificantes” y mostró algunos números sobre las necesidades de los sectores más vulnerables.
“Vemos que hay una mayor demanda que seguimos acompañando”, señaló Álvarez en contacto con el programa Radiópolis. El ministro precisó que el gobierno santafesino reparte “más de 250 mil raciones diarias de comida” a comedores y escuelas. El número se suma a otra cifra que habla de la mayor demanda de asistencia: los 72 mil nuevos pacientes que se incorporaron a la salud pública.
Sin embargo, advirtió Álvarez, ninguno de estos números tuvo su correlato con los recursos enviados desde el gobierno central. El ministro llamó la atención que en los últimos tres años, Nación aumentó apenas un 10 por ciento sus partidas por seguridad alimentaria y salud. “En un contexto de inflación y mayor demanda es insignificante”, ponderó.