El paro del transporte urbano e interurbano de pasajeros se mantiene este miércoles en Rosario por décimo día consecutivo. Esta mañana está prevista una reunión virtual entre autoridades del Ministerio de Trabajo, Empleo y Seguridad Social de la Nación, de la Dirección Nacional de Relaciones y Regulaciones del Trabajo, y representantes de la Unión Tranviarios Automotor (UTA) pero su secretario general en Rosario, Sergio Copello, anticipó que no considera que habrá un acuerdo o solución del conflicto. Por su parte, el secretario de Transporte santafesino, Osvaldo Miatello, tampoco se mostró optimista e insistió en la necesidad de un gran acuerdo entre todas las partes, sobre todo el gobierno nacional.
En diálogo con Radiópolis (Radio 2), admitió en relación a los que se podía considerar como un día clave: “No tengo grandes esperanzas”, señaló en relación a los resultados que puede llegar a aportar el diálogo institucional. “Están esperando de Buenos Aires lo que el resto del país nunca recibe”.
“Si no hay dinero no tenemos alternativas” al paro, manifestó y apuntó al gobierno provincial: “Parece que estuviera al margen”.
Por su parte, el propio secretario de Transporte santafesino, reconoció que el monto que se necesita para abonar lo que falta de los sueldos significan "cifras siderales, por fuera de las posibilidades de los gobiernos provinciales y municipales".
En contacto con el programa A diario, el ex concejal lamentó que Nación no haya sumado a las empresas del transporte a la Asistencia de Emergencia al Trabajo y la Producción (ATP) e insistió en que es necesario repensar cómo el gobierno nacional asigna sus subsidios, concentrados en su mayoría en Buenos Aires, en desmedro de las provincias.
Para Miatello, los ATP podrían haber sido una salida a este conflicto que no parece tener solución. Con todo, no descartó que pueda reflotarse esa posibilidad.
Copello lamentó la extensión de la inactividad y se mostró preocupado de cara al tiempo inestable que está pronosticado: “La gente anda caminando o en bicicleta”, observó.
Consultado sobre si existe la posibilidad que las autoridades locales consideren favorable que el transporte público esté parado en medio de una pandemia que lo desalienta, advirtió: “Hace pocos días dijeron que había pérdidas de 8 millones de pesos por día, entonces que les digan a la gente que no tienen transporte, y nosotros nos quedamos en casa con un sueldo y todos contentos”.
Sobre la posibilidad de “reconversión” laboral debido al coronavirus, sostuvo que se podría sectorizar la unidad por tipo de pasajeros “pero después no hay mucho más”, apuntó y descartó una reducción salarial.
El paro comenzó el lunes 11 de mayo, el mismo día que arrancó la fase cuatro de la cuarentena con la apertura de varios negocios en la ciudad.
Fue lanzado por los choferes de colectivos en reclamo del pago completo de los salarios de abril, ya que cobraron sólo una parte.
La medida afecta a todas las líneas urbanas de Rosario e interurbanas del departamento y se mantendrá hasta que terminen de depositar todos los sueldos a los trabajadores del sector.
