Una pareja de enfermeros, identificados como Dante Daniel Díaz y Angélica Coronel, fueron detenidos en Santiago del Estero acusados de robar cientos de vacunas contra el coronavirus para montar un vacunatorio privado en su propia casa, en donde vendían y aplicaban las dosis sustraídas.
Por su trabajo en el Ministerio de Salud, el hombre de 42 años tenía acceso al depósito de vacunas del que venía realizando robos pequeños, llevándose de a poco dosis del inmunizante para aplicarlas junto a su esposa en su vivienda a cambio de entre $20.000 y $30.000.
La propiedad está ubicada en la manzana 19, en el lote 22 del barrio San Germes, al sur de la capital santiagueña.
Fue la propia jefa de Inmunización de la cartera sanitaria provincial, María Florencia Coronel, quien descubrió el faltante e inmediatamente hizo la denuncia penal correspondiente ante la División de Homicidios y Delitos Complejos de la Policía de la provincia.
Desde la policía dieron intervención a la fiscal de turno Érika Leguizamón, quien solicitó los allanamientos a la jueza de Control y Garantías, María Cecilia Vittar.
El robo más grande fue de casi 300 dosis, en su gran mayoría de las Sputnik V, y se dio días atrás cuando el enfermero engañó al personal del Ejército Argentino que custodiaba el ultrafreezer instalado en el Ministerio de Salud provincial. Ese día se llevó un lote con refrigerantes en la mochila y el episodio quedó registrado por las cámaras de seguridad.
Inmediatamente se ordenó la detención del matrimonio de enfermeros y, al mismo tiempo, hubo varios allanamientos en distintas viviendas de la capital santiagueña que permitieron recuperar las vacunas: 268 dosis de Sputnik V, 14 Sinopharm y 1 dosis de vacuna Covishield.
Además, fueron secuestradas 510 dosis de diferentes vacunas que no serían contra el coronavirus, a las que Díaz también tenía acceso por ser empleado del área de Inmunización del Ministerio.
Todas las dosis fueron trasladadas por personal del Ejército Argentino bajo estrictos protocoles de no interrupción de cadena de frío y ya están nuevamente en el Ministerio de Salud.
También hallaron un arma de fuego tipo revólver, numerosos insumos de enfermería como jeringas, agujas, guantes descartables, barbijos, bolsas de residuos patógenos, libretas sanitarias de vacunación antiCovid-19 en gran cantidad, cremas para la piel y cánulas de oxígeno; y distintos tipos de documentación.
Fuentes de la investigación detallaron que en el domicilio también fueron secuestrados $734.500 pesos en efectivo, los cuales se presume son parte de lo abonado por quienes pagaron por recibir las vacunas.
Desde el grupo a cargo de la investigación señalaron que se procederá con la identificación y posterior detención de aquellas personas que fueron vacunadas de manera clandestina por la pareja de enfermeros.
La causa fue caratulada como "Hurto Agravado y Adulteración de Sustancias Medicinales en perjuicio del Estado Provincial".