Los panaderos de Rosario comenzaron en los últimos días a actualizar el precio del kilo de pan. Según explicaron, la decisión responde a una suba abrupta en el precio de la harina producto del aumento del valor del trigo. “El kilo va a estar entre los $2.200 y los $2.300”, detallaron.
“Venimos haciendo estudios de costos mes a mes y se dio la eventualidad de que este mes hubo una suba muy fuerte de la harina”, detalló en diálogo con Cada Día (El Tres), Diego Rubio, referente de la Asociación de Industriales Panaderos de Rosario.
De acuerdo al comerciante, en los últimos 15 días recibieron aumentos superiores al 20 por ciento en el valor de la bolsa de harina y todo indica que la suba va a seguir. “Lo que nos dicen desde los molinos es que no hay techo porque el trigo sigue subiendo”, aclaró.
“Aducen a la ecuación del dólar blue, que les permiten liquidar con dólares financieros a los exportadores entonces eso sube el precio local, y también lo que pasa en Brasil que por las inundaciones perdió parte de su cosecha y entonces están exportando más”, remarcó Rubio.
Ante este panorama, desde la asociación de panaderos remarcaron que están intentando abrir un canal de diálogo con el Ejecutivo para evitar que falte harina en los próximos meses. “No queremos llegar a lo que pasó otros años donde liberan exportaciones y cuando llega la cosecha en el norte, no alcance la harina para el consumo local. Hubo años donde pagamos más caro que el precio internacional por la falta de harina”, advirtió el referente del sector.
Con respecto al aumento, Rubio explicó que algunos locales ya comenzaron a aplicarlo dado que no tenían stock de harina y ya comenzaron a utilizar las bolsas con el nuevo precio. Además, denunció que los molinos no están permitiendo a los panaderos stockearse para poder sostener el precio. “Todos te venden más o menos lo mismo que te venían vendiendo”, remarcó.
Consultado sobre el panorama general de las panaderías, Rubio señaló que las subas de insumos y servicios es similar a la del año 2017, “pero ese año no teníamos una recesión tan profunda como ahora", explicó.
"Tenemos el problema que se había dado en 2017 que era similar a este con las tarifas. El tema es que en 2017 no había una recesión tan profunda como ahora. Nosotros trabajamos con clientes de cercanía, que siguen viniendo, pero el consumo es menor”, concluyó.
