Este sábado continuaban los controles en los ingresos a la provincia de Santa Fe, con mayor énfasis en el peaje de General Lagos, en la autopista a Buenos Aires, para evitar el acceso de personas provenientes de la zona de mayor circulación de coronavirus sin justificativos.
En las últimas 24 horas, la Policía de Seguridad Vial de la provincia realizó 8.726 controles y 74 vehículos fueron escoltados de regreso a su lugar de origen debido a que no pudieron acreditar permisos esenciales para ingresar al territorio.
En total, desde el miércoles pasado, suman 300 los autos rechazados, la gran mayoría de Buenos Aires. Mientras tanto, en Capital Federal llaman a estos controles “operativo caza-porteños”.
El titular de la Agencia Provincial de Seguridad Vial, Osvaldo Aymo, informó que “estamos siendo sumamente estrictos a la hora de revisar la documentación que exhiben quienes quieren ingresar al territorio provincial, ya que tenemos muy claro que es la única manera de resguardar los logros de todos los santafesinos a la hora de contener la pandemia”.
En este sentido, Aymo afirmó que “desde el miércoles a las 17 horas que reforzamos los controles hasta hoy ya llevamos más de 300 vehículos que no han podido continuar su viaje hacia la provincia de Santa Fe por no acreditar la documentación respaldatoria o no haber superado el test de anosmia".
En el programa Radiópolis Weekend (Radio 2), pero periodista Juan Cruz Funes entrevistó a uno de los inspectores que coordinaba el control en el peaje de la autopista: “La mayoría son de Buenos Aires los que intentaron ingresar y se tuvieron que pegar la vuelta”, dijo. Y precisó que “entre la madrugada y el mediodía de hoy hemos enviado de regreso a unos 30 vehículos”.
El oficial confió que “hay gente que se enoja, que se retira ofuscada, pero así son las reglas que deben acatar en este momento tan particular”.
El agente puntualizó que “hay personas de Pueblo Esther que intentaron eludir el control del peaje por un camino alternativo y fueron demoradas”.
“Hay otras personas de la provincia de Santa Fe que no pudieron pasar porque tenían permiso para reuniones afectivas, pero excedían el radio de 30 kilómetros entre el lugar de origen y el de destino”, contó.
Mientras tanto, generaron polémica en las redes sociales la forma en que varios medios de Buenos Aires rotularon a los controles que se están realizando en los accesos a la provincia de Santa Fe, para evitar el turismo en este fin de semana largo. Aseguran que es un operativo “caza-porteños”.