El caso más resonante de este año en Rosario fue el de Benjamín, el nene que recibió un impacto de bala en su cabecita cuando se disponía a jugar un partido de fútbol en el club Pablo VI. Pero hubo otros episodios, 21 en total, según el balance de la directora del hospital de Niños “Víctor J Vilela”, que es el que recibe la mayoría de estos casos en nuestra ciudad. Otro dato importante es que los menores heridos no fueron atacados en forma directa; ocurrieron por balas perdidas o porque las víctimas quedaron en medio de balaceras. Al menos el consuelo es que no hubo que lamentar fallecimientos.
Viviana Esquivel, quien está al frente del equipo médico del hospital “Vilela” de Rosario, precisó en el programa Radiópolis (Radio 2) que “en 2019 tuvimos 21 casos de niños y niñas alcanzadas por disparos de armas de fuego en el hospital”.
La médica amplió que “fueron casos de balas perdidas o de chicos que quedaron en medio de balaceras; en ningún caso fue por ataque directo”.
Luego, Esquivel destacó que “afortunadamente en todos los casos los niños se recuperaron y no hubo que lamentar fallecimientos”. De todos modos, aclaró que “en algunos de esos casos, los más graves, continúan con la rehabilitación aquí en el hospital”.
La directora del hospital público explicó que el "Vilela" recibe a pacientes "hasta los 18 años en los casos de enfermedades crónicas o graves y hasta 15 años en los episodios agudos".