Agentes de Aduana afectados al control de micros internacionales de larga distancia secuestraron este jueves cuatro cráneos humanos procedentes de la República del Paraguay cuando un ómnibus cruzaba el Puente Internacional San Ignacio de Loyola para ingresar a la Argentina.
El escáner de equipaje mostró una imagen que dejó sin palabras al personal de la Aduana de Clorinda. Así, se procedió al control físico del equipaje propiedad de una ciudadana que viajaba en el micro con destino a Buenos Aires. Disimulados entre sus objetos personales se hallaron cuatro cráneos humanos completos, algunos con maxilares y dentadura.
“El hecho constituye una infracción al régimen de equipaje, que contempla los efectos que los viajeros puedan traer para su uso personal o para regalo, siempre que no tengan fines de comercialización y sean admitidos por la vía en cuestión, que obviamente no aplica a restos humanos”, señalaron desde el área de prensa de la Aduana.
Al ser interrogada por agentes especializados de la Dirección General de Aduanas-AFIP, la propietaria manifestó que las calaveras estaban siendo ingresadas a la Argentina para posteriormente ser enviadas a Estados Unidos, donde serían sometidas a estudios científicos. El insólito argumento fue que los profesionales tendían a elegir este tipo de cráneos por estar completos y tener antepasados europeos, lo cual resulta atractivo por su morfología, anatomía y aspectos de interés médico y antropológico y en algunos casos, también, relacionados a rituales religiosos y de coleccionistas.
Desde la Aduana señalaron que el valor de estos objetos en el mercado negro puede ascender a miles de dólares y tienden a ser comercializados mediante subastas online.