El presidente de la Asociación de Clínicas y Sanatorios de Rosario, Roberto Villavicencio, atendió personalmente a Carlos Reutemann, quien falleció este miércoles en Santa Fe. De acuerdo a lo que explicó, el ex senador sufrió una “desviación o complicación de su enfermedad hepática”. Consideró que había sido un buen paciente pero, sobre todo, resaltó rasgos de su personalidad.
En contacto con Radiópolis (Radio 2), Villavicencio explicó en relación al deceso de Reutemann: “Fallece de una desviación o complicación de su enfermedad hepática que lo llevó a una cirugía. Es una enfermedad neoplácita un cáncer de los conductos biliares . Esto tuvo una muy buena resolución en una cirugía en 2017 en Nueva York”, comenzó. “Los dos primeros años estuvo perfecto y a partir de 2019, 2020 comenzó con una obstrucción parcial de la vena porta que lleva toda la sangre al hígado”.
“A raíz de la cirugía, no del cáncer, se produce una subobstrucción de la vena porta con una hipertensión portal denominada prehepática, antes del hígado. Esto condiciona la formación de várices en todo el tubo digestivo, las más importantes están en el estómago y el esófago, él tenía también en el intestino grueso y en el delgado pero la más importante de sangrado la tenia en la anastomosis entre el hígado conservado y el tubo digestivo, es lo que se llama una várice atípica. Esto fue el 8 de mayo cuando se decide trasladarlo a Rosario”, continuó.
“Corregido eso también, se intentó corregir con éxito la obstrucción de la vena porta a través de varios stent y luego de eso fue dado de alta de nuestra institución el 21 de mayo, pero con una enfermedad imposible de modificar”, lamentó.
Consultado acerca de que si el ex senador fue un “buen paciente”, observó: “Lole era una persona muy especial para esto, era buen paciente desde el punto de vista de su entrega inicial pero después, seguir las indicaciones médicas le costaban un poco. Era muy buena persona, muy sensible, que daba gusto atender y trabajar en recuperarlo de alguna manera”-
Además, Villavicencio recordó que Reutemann “estaba vacunado contra covid y le tenía un miedo reverencial, estaba aislado antes y prácticamente también después”.
La relación entre ambos se forjó en 2008. “Por la columna lo he atenido muchísimos años. Una vez cuando iba a Buenos Aires en el viaje hace un dolor agudo en el abdomen, cuando pasa por Rosario me viene a ver y tenía una disección del tronco celíaco que es la principal arteria del abdomen y en pocas horas le colocamos un stent y desde ahí nos tenía una confianza muy grande.”, indicó y precisó en torno a un recuerdo: “Estaba internado acá cuando se votó la 125. Votó la senadora Latorre, lo llamaba cada dos minutos, me queda como anécdota”, concluyó.