La presión del Poder Ejecutivo surtió efecto y finalmente la Cámara de Diputados convocó a un plenario de comisiones el jueves por la mañana con la intención de firmar dictamen favorable al proyecto de "Emergencia Covid", y sumar ese expediente al temario de la sesión prevista para esa misma tarde.

La iniciativa ya tiene media sanción del Senado. Fue votada favorablemente por 38 senadores, mientras 26 se pronunciaron en contra. El tema, además, fue abordado en el cónclave que mantuvieron Alberto Fernández y el titular de la Cámara de Diputados, Sergio Massa, el domingo en Olivos.

El plenario de las comisiones de Asuntos Constitucionales y Salud se reunirá el jueves a las 10 y el Frente de Todos intentará dictaminar el proyecto que establece una serie de parámetros epidemiológicos para la aplicación de restricciones a las actividades y la circulación.

Si el plan funciona, el gobierno logrará evitar el dictado de un decreto de necesidad y urgencia (DNU) el próximo viernes, cuando se cumple el plazo de las restricciones que rigen de acuerdo al último decreto.

Por el momento, el temario de la sesión incluye únicamente el proyecto de "zona fría", que apunta a otorgar descuentos de entre el 30 y el 50% en las tarifas de gas que pagan usuarios residenciales de localidades con bajas temperaturas, a partir de un agresivo esquema de subsidios y que será dictaminado este miércoles a las 15 en una reunión conjunta de las comisiones de Energía y Combustibles y Presupuesto y Hacienda.

El oficialismo confía en tener el número suficiente de avales para la firma del dictamen de mayoría al proyecto de "Emergencia Covid" y de esa forma incorporar al temario esta iniciativa que configura una suerte de "semáforo epidemiológico".

El panorama para la votación es incierto, ya que el oficialismo tenía hasta hace pocos días dificultades en reunir los 129 votos necesarios para aprobar el proyecto, por lo que el escenario está abierto y se definirá por un muy estrecho margen.

Desde el momento en que se ingresó el proyecto, Juntos por el Cambio se posicionó en contra alegando que la iniciativa habilita "superpoderes" para el presidente Alberto Fernández, avasallando el federalismo y las autonomías provinciales y de la Ciudad. La izquierda, Consenso Federal y los cuatro diputados que responden al schiarettismo también manifestaron que votarían en contra.

El oficialismo cuenta con 117 votos de su bloque y con los 6 del interbloque Unidad Federal para el Desarrollo que conduce el mendocino, José Luis Ramón. Ante este escenario, depende del voto de parte de los indefinidos del interbloque Justicialista que encabeza Eduardo "Bucca" Bali y de los dos legisladores de Acción Federal por lo que las negociaciones continuarán contrareloj.

El proyecto define y clasifica distintos escenarios epidemiológicos medidos en función de ciertos parámetros de riesgo sanitario, cada uno de los cuales habilita a los gobiernos nacional y provinciales a establecer determinadas restricciones a la circulación y a las actividades.

El Poder Ejecutivo considera que una ley con parámetros objetivos aportará mayor legitimidad a las medidas sanitarias y evitará las desgastantes discusiones que se producen cada vez que hay que dictar un nuevo DNU al expirar el plazo de vigencia del anterior.

Aseguran que la plena vigencia de una ley nacional obligará a las distintas jurisdicciones a adherir a las medidas de restricción, minimizando así el riesgo de que algún distrito desacate la norma, como ocurrió con la Ciudad de Buenos Aires respecto del DNU presidencial.