Un matrimonio sufrió el robo de su camioneta, pero lo peor del hecho fue que en el interior del vehículo se encontraba Lola, su mascota. Vivieron horas de desesperación hasta que una pareja se comunicó con ellos por teléfono: tenían a la perrita consigo. Curiosamente, son dueños de una peluquería canina.
Jorge y Clide contaron en De 12 a 14 (El Tres) lo que debieron transitar. Este miércoles al mediodía, el hombre sacó su camioneta Berlingo del garage de su casa ubicada en 9 de julio al 1000. Metió a Lola en su interior y la estacionó enfrente de la vivienda. Cruzó a cerrar el portón y cuando se dio vuelta, de acuerdo a su testimonio, no estaba ni el coche ni la perrita.
⭕ Les robaron la Berlingo con su perra adentro, pero lograron encontrar a Lola ��
— De12a14 (@De12a14) November 7, 2024
Un momento de total desesperación vivió una familia cuando les robaron su utilitario Berlingo con su perra adentro.
"Fue una desesperación total. A Lola la encontraron muy lejos," contaron sus… pic.twitter.com/tyFiat2EtP
“Fueron como mucho 25 segundos, una cosa de locos. No me anda el control del portón así que bajé a cerrar la casa. No sabes qué hacer primero, si cerrar la casa o el auto”, sostuvo Jorge. “Cuando me di vuelta ya no estaban, no sé cómo hicieron tan rápido”, agregó.
La intención de Jorge era sacar la camioneta para dirigirse a buscar a su esposa Clide, quien se estaba realizando un estudio en Tucumán y Dorrego. La mujer esperó en vano la llegada del esposo y en cambio, le cayó un mensaje en su teléfono: era el hijo quien le refería el robo.
La pareja coincidió en que sus vecinos tuvieron un papel fundamental en esta historia. “Comenzaron a viralizar por redes sociales que se habían robado la camioneta con Lola y tipo 12.30 de la noche recibimos un llamado, había aparecido Lola”, relató Clides.
Curiosamente, quienes encontraron a la perrita es una pareja que se dedica a la peluquería canina. Al parecer, el o los ladrones soltaron al can que deambuló hasta detenerse frente a la vivienda en cuestión, en barrio 7 de septiembre. “Es gente de una peluquería canina, la vieron, la hicieron entrar y se comunicaron. Como tenían que atender un turno esta mañana por acá, la trajeron”, agregó.
El reencuentro incluyó lágrimas, pero de felicidad. Lola estaba perfecta y regresaba a su hogar: “La Berlingo me hace falta pero más me hace falta el cariño de Lola, sin la Berlingo vivo pero sin ella no”, resumió Jorge y el rostro de Clide evidenció que siente lo mismo.