Al técnico informático Diego Lagomarsino le gustó el documental de Netflix sobre la muerte del fiscal Albreto Nisman. Lagormasino es el dueño del arma que mató a Nisman. Para el técnico la serie “está muy bien lograda” y desmiente algunas versiones, como la falta de material fílmico de ese fin de semana del 17 de enero de 2015. El fiscal fue hallado muerto en si departamento de Puerto Madero el 19, horas antes de tener que exponer sobre la causa Amia que investigaba en el Congreso.
“(La miniserie documental Nisman: el fiscal, la presidenta y el espía) es muy buena, está muy bien lograda, muy bien caracterizada, hace una mezcla entre momentos reales y ficcionados”, destacó Lagomarsino en contacto con el programa A diario (Radio 2).
En tal sentido, señaló que el documental muestra imágenes tomadas por las cámaras de seguridad de las torres Le Parc, lo que desmintió, a su entender, la versión del diputado nacional Waldo Wolff, entre otros.
“Hubo mucha gente que estuvo diciendo por muchísimos años que las cámaras de Le Parc no funcionaban y ahora vemos que sí, que funcionaban. Esa gente no quedó muy bien parada. Los que estamos en la causa sabemos que existían. Lo dijo un diputado, Waldo Wolff, no mi tía Rita”, se despachó.
Consultado al respecto, el propio Wolff –autor del libro Asesinaron al fiscal Alberto Nisman, yo fui testigo– aclaró que algunas cámaras no funcionaban, pero otras sí. E insistió en que Lagomarsino tiene “puntos oscuros” y que es un “hábil declarante” que le dice a la prensa “la mitad que le conviene”.
Lagomarsino está procesado en la causa que investiga la muerte del fiscal como partícipe necesario ya que el arma que lo mató era suya.
El técnico informático aclaró que él le dio su arma a Alberto Nisman en persona y rechazó la versión que indica que se la dio a sicario. “Dicen que no le doy el arma a Nisman, sino a un comando que termina asesinándolo. La pregunta básica es: ¿quién sería tan estúpido de darle su arma a un comando asesino?”.