En las últimas horas, las redes sociales se poblaron de comentarios en torno de una pelea entre el periodista Tomás Rebord, conocido por «El método Rebord», y la politóloga feminista Florencia Freijo. La escritora criticó duramente la entrevista de Rebord a Alberto Fernández y el conflicto escaló hasta llegar a amenazas de los seguidores de ambos.

La disputa se inició el domingo pasado, tras la entrevista de Rebord al presidente de la Nación. Freijo escribió en su cuenta oficial de Twitter: "Es el ejemplo más claro de cómo se sobrestima a los tipos por el hecho de construirse una narrativa de flaco inteligente, del ‘ámbito popular’ y voz gruesa. Lo inflado que está, dios mío, no entiendo cómo no se avivaron que es un pelotudo bárbaro. Ustedes sabrán".

La apuesta de Freijo escaló y todo terminó en escándalo: "Necesito que el ámbito joven del peronismo revea a los ídolos del entretenimiento que construyen, porque siempre son el mismo perfil de chabón soberbio, con denuncias por abuso contenidas que en cualquier momento saltan", indicó la politóloga e, inmediatamente, los seguidores de Rebord en las redes sociales cargaron contra ella.

Freijo denunció haber sido amenazada

 

Más tarde, María Florencia Freijo aclaró que sus comentarios no estaban apuntados a Tomás Rebord. Aunque ya era demasiado tarde, porque el conflicto iba subiendo en tensión.

"Niego rotundamente haber acusado de abuso sexual a Tomas Rebord. Fueron dos Tweets separados. El segundo tweet, al darme cuenta de la malinterpretación, fue borrado al minuto. Alguien hizo captura y comenzó toda esta mierda. Vino un tipo a casa y me enviaron emails y amenazaron", manifestó.

De hecho, este miércoles Freijo debió salir de su casa junto a su hijo tras la violencia de esos hechos narrados. "Mi hijo llora. Yo hago las valijas corriendo. Vienen los amigos. La policía en la puerta. Nuestra vida acaba de cambiar. Hay que morir con esto por dentro, porque también sos pecadora si lo decís. Mi comunidad jamás hubiera hecho algo así con nadie. Hay que hacerse cargo", describió.

Qué dijo Tomás Rebord

 

Hace algunas horas, el periodista compartió un hilo de Twitter con una larga reflexión: "Compatriotas y enemigos, recibo una cantidad sin precedentes de mensajes pidiendo que “llame a la calma”, como si hubiera comandado a la locura o como si tuviera algún tipo de control sobre el delirio colectivo que se produce en redes sociales", inició.

Luego, Rebord agregó: "Jamás imaginé que una nota al Presidente terminaba en una charla con mi vieja para tranquilizarla porque Florencia Freijo la acusa de haber pedido 'disculpas en mi nombre', cosa que jamás sucedió".

Además, sumó: "Hoy si alguien Googleá «Rebord» encontrará no menos de cinco portales de noticias asociando mi nombre a delitos graves, hace tres días recibo mensajes acusándome literalmente de asesinatos, nadie pidió ni pedirá disculpas a mí o a mis familiares que (con razón) se preocuparon".

"Hace tiempo entendí que hacer cosas espectaculares (diablos, qué buenos productos hago) trae estos costos, es tan injusto como ineludible. Lo único que me hace daño es que sufra mi familia y quienes quiero (quizás cuando mueran sea libre e indetenible) por ellos escribo esto", expresó.

"No hice nada, ni antes, ni durante, ni después. Ni opiné, ni mande mails desde un mismo remitente, ni mandaría a hostigar jamás a alguien por decir pelotudeces (incluso si esas pelotudeces son graves). Asisto a un Minority Report local donde en vez de oráculos hay esquizofrénico".


En tanto, informó que Freijo lo bloqueó: "No puedo ver que sube ni comenta Florencia Freijo porque fui bloqueado por ella misma después de sus dichos, si pudiera hablarle le diría que se quede tranquila, que de mí no recibirá ni agresiones ni interacción alguna. En rigor, simplemente no me interesa lo que opine.

"Tampoco creo que el «humor» pueda ser orientado o dirigido, sucede. Pero puedo compartir mi límite personal (en caso de que alguien quiera usarlo): la crueldad. Personalmente, a mí las cosas dejan de divertirme cuando veo sufrir a alguien y creo que Florencia la está pasando mal", apuntó