La petrolera de mayoría estatal YPF anunció esta medianoche un nuevo aumento en los precios de sus combustibles. La suba, que rige desde las 0, es de 3,5% promedio en todo el país y se debe a un incremento en los valores de dos impuestos que pagan las petroleras.
De acuerdo a lo que informaron en Radiópolis (Radio 2), este viernes el impacto ya era visible. La Súper se vendía a 65.84 pesos, la Premium 74.41 pesos, Diésel 59.22 pesos y Diésel Premium a 68.90. La actualización se concretó a la medianoche en el interior del país y está previsto que las demás petroleras también dispongan incrementos.
Se trata de la tercera suba en casi dos meses. La anterior, el 18 de septiembre, había sido también de 3,5% a nivel nacional aunque en la Ciudad y el Conurbano los valores fueron algo superiores. La secretaría de Energía decidió un incremento de impuestos que estaba pendiente del último semestre y que estaba previsto desde hoy, informó Clarín.
El Gobierno le había pedido a las petroleras que no trasladen el incremento. Pero las compañías descartaron esa posibilidad, ya que se encuentran con menores niveles de venta.
Con este incremento, los precios de las naftas ya subieron casi un 15% en los últimos 60 días. Todo el retraso desde diciembre hasta agosto comenzó a liberarse.
YPF aplicará otro aumento en diciembre, según se desprende de una exposición de Sergio Affronti, CEO de la petrolera. También se contempla la posibilidad de un retoque en noviembre.
El encarecimiento también se debe a un encarecimiento de los biocombustibles que las petroleras deben incluir en su mezcla.
Según un cálculo de Energy Consilium (la consultora encabezada por el ex ministro de Energía Juan José Aranguren), el incremento iba llegar hasta el 3,3% en el precio de las naftas. Esa estimación terminó acercándose bastante a la realidad, del 3,5%, por el peso de biocombustibles.
Sergio Affronti, CEO de YPF, dijo que tiene un “un objetivo de precios a alcanzar a diciembre de este año”, aunque no especificó el número en particular. En el sector calculan que habrá dos aumentos más, hasta llegar a un 10%. De esa forma, el segundo semestre terminará con un encarecimiento del 25% en los combustibles.
Nafta y gasoil pagan impuestos a los combustibles líquidos (ICL) y al dióxido de carbono (IDC). La actualización de esos tributos es trimestral. A través de un decreto, el Poder Ejecutivo postergó la aplicación de los incrementos que debió realizar por el primer trimestre y el segundo trimestre.
Los montos de Ios impuestos (ICL e IDC) se actualizan en base a trimestre, sobre la base de las variaciones del Índice de Precios al Consumidor (IPC), del INDEC.
La idea de ir modificando las alícuotas de los impuestos fue para atenuar potenciales subas (o bajas) en la cotización del petróleo crudo y que eso impacte en el precio de los combustibles. En el contexto actual (del barril a menos de US$ 45), es improbable que se haga uso de esas facultades.
Con los aumentos antes descriptos, la recaudación mejoraría en $ 2.300 millones mensuales. Consilium calculó ese número con los volúmenes de venta de gasoil y nafta estimados para el tercer trimestre. Sin embargo, el trimestre de aplicación (octubre-diciembre) podría ser de mayores despachos por menores restricciones sanitarias.