La muestra recolectada del asteroide Bennu por la misión de la Nasa Osiris-Rex contiene agua y altas cantidades de carbono, reveló la agencia espacial estadounidense y dio a conocer los resultados preliminares del análisis del material.
Los estudios iniciales de la muestra del asteroide Bennu, de 4.500 millones de años de antigüedad, recolectada en el espacio y traída a la Tierra, muestran evidencia de un alto contenido de carbono y agua, que en conjunto podrían indicar que los componentes básicos de la vida en la Tierra se pueden encontrar en la roca, explicó la agencia espacial en un comunicado en su página oficial.
Aunque se necesita más trabajo para comprender la naturaleza de los compuestos de carbono encontrados, el descubrimiento abre paso a futuras indagaciones. La propia Nasa vaticina que los secretos que contienen las rocas y el polvo del asteroide se estudiarán durante décadas.
More carbon than expected and an abundance of water were found in the 4.5-billion-year-old asteroid sample returned to Earth by #OSIRISREx. The two combined could mean that the building blocks for life on Earth might be locked in these rocks: https://t.co/IY6QfXXqeT pic.twitter.com/olxjDQG6bm
— NASA (@NASA) October 11, 2023
La misión Osiris-Rex dejó caer el recipiente con el material recolectado de Bennu el 24 de septiembre durante su paso por la Tierra y, sin aterrizar, continuó su rumbo hacia el asteroide Apofis.
El administrador de la Nasa, Bill Nelson, aseveró que el material de Bennu "es la muestra más grande de asteroide rica en carbono jamás entregada a la Tierra y ayudará a los científicos a investigar los orígenes de la vida en nuestro propio planeta durante generaciones".
Durante los próximos dos años, el equipo científico de la misión continuará caracterizando las muestras y realizando los análisis necesarios para cumplir los objetivos científicos de la misión. La Nasa preservará al menos el 70% de la muestra en para futuras investigaciones por parte de científicos de todo el mundo, incluidas las generaciones futuras.
Como parte del programa de Osiris-Rex, un grupo de más de 200 científicos de todo el mundo explorarán las propiedades del regolito, incluidos investigadores de muchas instituciones estadounidenses, socios de la Nasa Jaxa (Agencia de Exploración Aeroespacial de Japón), CSA (Agencia Espacial Canadiense) y otros científicos de todo el mundo.
Osiris-Rex es la tercera misión del Programa Nuevas Fronteras de la Nasa, administrado por el Centro Marshall de Vuelos Espaciales de la agencia en Huntsville, Alabama, para la Dirección de Misiones Científicas en la sede en Washington.