Desde hace 24 años, distintas organizaciones reciben un apoyo económico anual de la Municipalidad de Rosario con el objetivo de fortalecer las políticas sanitarias en relación al VIH/SIDA. En este marco, la Secretaría de Salud Pública lanzó una nueva convocatoria para cofinanciar proyectos sobre esa enfermedad y otras como sífilis, ITS y hepatitis virales, cuyas bases y condiciones pueden consultarse en este enlace.  

Este año los proyectos recibirán un máximo de 275.000 pesos anuales, y se espera que respondan a esta convocatoria anual un total de 15 organizaciones. En todos los casos se trata de un cofinanciamientos de hasta el 70 por ciento del monto total de las propuestas, en tanto las entidades aportan las fracciones restantes del total de gastos de las mismas.

Cabe destacar que para la selección y asignación de los fondos, la cartera sanitaria local establece cada año bases para la presentación de proyectos y designa un comité evaluador para la elaboración de un dictamen, que sirve de principio para concretar los convenios. 

El Programa Municipal de VIH, ITS, y Hepatitis Virales dependiente de la Secretaría de Salud Pública de Rosario (ex Promusida, renominado por Ordenanza 10.218/21) lleva adelante esta estrategia de cofinanciamiento de proyectos de las Organizaciones de la Sociedad Civil (ONG) desde el año 1998, con un claro impacto en la salud colectiva de la ciudad en cuanto a VIH y problemas relacionados se refiere.

Los proyectos incluyen acciones de divulgación, educación, diseño de piezas de comunicación especiales, talleres con la comunidad, distribución de preservativos, desarrollo de acciones de detección asesorada, con pruebas rápidas y convencionales, para la identificación de la infección por VIH, las hepatitis virales B y C, y la sífilis. 

Cabe recordar que Rosario trabaja desde el inicio de la epidemia en 1986 en la prevención primaria del VIH, la detección temprana de la infección, y el tratamiento de todas las personas con VIH para que puedan mantener su calidad de vida, y a su vez para que sea poco probable que transmitan la infección a otras personas, a partir de que las drogas antirretrovirales vuelven indetectables el virus en la sangre y fluidos de las personas en tratamiento.

En este marco, el trabajo articulado con la sociedad civil ha demostrado ser una estrategia de gran beneficio para la salud de la comunidad, ya que las ONG llegan con sus proyectos a personas y grupos de difícil acceso, en situaciones especiales, favoreciendo su adscripción al sistema de salud, a través de su puerta de entrada que son los centros de salud, hoy presentes en todos los barrios de la ciudad.