El presidente de Estados Unidos, Joe Biden, llegó este miércoles a Israel para solidarizarse con el pueblo judío tras el ataque terrorista de Hamás. En su primer discurso, el mandatario consideró que la explosión que tuvo lugar en un hospital en Franja de Gaza este martes, que dejó cientos de muertos, "parece ser una obra del otro equipo y no del ejército israelí".
Tras aterrizar en el aeropuerto de Ben Gurion, en las afueras de Tel Aviv, donde se encontró con el primer ministro de Israel, Benjamin Netanyahu, declaró: "Me sentí profundamente entristecido e indignado por la explosión en un hospital de Gaza ayer. Y en función de lo que he visto, parece que fue obra del otro equipo, y no de ustedes".
Al mismo tiempo, de acuerdo a lo que precisó EFE, pidió ayudar a la población "inocente" que quedó "en mitad" del conflicto entre las fuerzas israelíes y las milicias palestinas. "Hamas no representa a todos los palestinos", aseveró.
También remarcó que "el mundo está observando" lo que sucede en esta zona de Medio Oriente y destacó que "Israel tiene un conjunto de valores, como Estados Unidos y otras democracias".
Además, el mandatario estadounidense afirmó en Tel Aviv que trabajará con Israel para evitar "más tragedias" de civiles. "Continuaremos trabajando con ustedes y nuestros socios a través de la región para evitar más tragedias de inocentes", declaró.