La Mesa Promotora Quinta de Funes organizó para este lunes por la tarde una recorrida por el espacio ubicado en esa localidad que, durante la última dictadura cívico-militar, funcionó como un Centro Clandestino de Detención en el que hombres y mujeres permanecieron secuestrados y fueron torturados entre septiembre de 1977 y enero de 1978, por orden de los generales Leopoldo Galtieri y Luciano Jauregui.
El edifico ubicado en el cruce de la ruta 9 y la calle San José, a pocos kilómetros de Rosario, fue expropiado en 2017 por el gobierno santafesino con el propósito de reconvertirlo en un espacio para defender la lucha por los derechos humanos, un proyecto que durante los años siguientes no prosperó.
Es por ello que desde la Mesa Promotora buscan saldar esa deuda e invitan a la comunidad a participar de un recorrido esta tarde, para el que las puertas de la quinta se abrirán a partir de las 16 y hasta las 20.
Lautaro Danna, integrante de la mesa, destacó que esta actividad tendrá lugar en el 48 aniversario de "La Noche de los Lápices", fecha que recuerda los secuestros en septiembre de 1976 de jóvenes estudiantes, la mayoría de los cuales militaban políticamente en la Unión de Estudiantes Secundarios, agrupación estudiantil encuadrada en el peronismo de izquierda, y en la Juventud Guevarista, rama juvenil del Partido Revolucionario de los Trabajadores.
A su vez, mencionó que se van a proyectar algunos materiales documentales producidos por estudiantes de la Escuela Provincial de Cine y TV de Rosario, que también este lunes está cumpliendo 40 años desde su fundación.
En diálogo con La Primera de la Tarde (Radio 2), Danna comentó que el objetivo de la convocatoria es "convertir a este ex Centro Clandestino de Detención en un sitio de memoria, verdad y justicia abierto a la comunidad, con capacitaciones, talleres y actividades artísticas, como indica la ley de expropiación".
Para esto, integrantes de la la Mesa Promotora vienen trabajando desde hace cuatro meses realizando tareas de limpieza y reparaciones en el predio conformado por el chalet histórico, un galpón de más de 400 metros cuadrados y dos hectáreas de árboles, entres otras instalaciones que durante los últimos años se vieron afectadas por actos de vandalismo y robos.
La iniciativa cuenta con el apoyo de la Secretaría de Derechos Humanos de Santa Fe, el Municipio de Funes y otras instituciones.
Desde la Quinta de Funes también se ideó el plan de inteligencia conocido como "Operación México", cuyo objetivo fue secuestrar a la cúpula de Montoneros, y la mayoría de las personas que estuvieron detenidas allí aún permanecen desaparecidas.
"Queremos que se convierta en el monumento a la memoria, verdad y justicia y que haya actividades que también nos permitan reflexionar sobre el presente", concluyó Danna.
La Quinta de Funes integró el circuito represivo de la subzona 21, dependiente del Comando del II Cuerpo de Ejército, con asiento en Rosario y que abarcó las provincias de Santa Fe, Entre Ríos, Corrientes, Misiones, Chacho y Formosa.